Salvemos ¿las dos vidas?
El «Día del niño por nacer» se recuerda cada 25 de marzo. Este año, las organizaciones antiderechos se manifestaron en algunas ciudades del país entre el sábado 23 y el lunes 25. Aunque el lema es “salvemos las dos vidas”, se olvidan siempre de una, la de las personas con capacidad de gestar.
Por Redacción La tinta
En 1993, El Salvador se convirtió en el primer país en oficializar el Día del Derecho a Nacer. Posteriormente, otros países cambiaron su nombre por “los no nacidos”. En 1999, en Argentina, se constituyó el Día del Niño por nacer, a través de una resolución emitida por el aquel entonces presidente Carlos Saúl Menem.
El 25 de marzo, se hace referencia a la Solemnidad de la Anunciación que coincide, en algunos países del mundo, con el Día del Niño por Nacer que, supuestamente, busca conmemorar, promover y defender la vida humana desde la concepción en el vientre de la madre.
Con banderas de Argentina, pañuelos celestes y algunas consignas como «salvemos las dos vidas», se convocaron miles de personas en Buenos Aires, Salta, Corrientes y Necochea el sábado 23 de marzo, sin embargo, en Córdoba, se convocaron el lunes 25. Otros carteles que se leían eran con lemas como: “Con mis hijos no te metas», «Dios me dio ovarios para defender a la vida», «Con aborto no te voto», «Sí a la Educación Sexual, No a la ideología de género» y «El aborto es un gran comercio».
El acto central en el Congreso en Buenos Aires contó con la presencia de “Alma”, el muñeco gigante que representa a un feto en gestación. La movilización fue convocada por la organización internacional Marcha por la Vida y contó con la adhesión de la Conferencia Episcopal, la Alianza Cristiana de Iglesias Evangélicas y numerosas ONGs antiderechos. También hubo veteranos de Malvinas que se pronunciaron: «37 años atrás, defendimos nuestras dos islas, hoy defendemos las dos vidas”.
Alejandro Geyer coordinador de la «Marcha por la vida», en una entrevista con la periodista de TN Valeria Sampedro, afirmó que “puede haber un caso” en que una nena, como la ya difundida de Tucumán, tenga relaciones consentidas con un familiar y que, pese a lo que dice la legislación vigente, debería continuar con el embarazo. ¿De qué dos vidas hablan estas personas? ¿Qué significa para ellxs salvar “las dos vidas”? ¿Pueden las niñas tener relaciones consentidas a los 10 u 11 años con familiares cercanxs?
Cuánta aberración hay en sus palabras. Claro está que el único objetivo es disciplinarnos, silenciarnos y pretender que nos conformemos con lo que nos sucede sin poder cuestionar ni decidir sobre nuestras vidas. Salvar la vida es resguardar nuestra integridad, nuestra dignidad y nuestro derecho a decidir. #SeráLey.
*Por Redacción La tinta / Imagen de portada: M.A.F.I.A.
