De caravana: el grito de La Poderosa llega a Porto Alegre
Los días 27, 28 y 29 de julio se realiza en Brasil el 2° Foro Latinoamericano de La Poderosa, una Cumbre de Base que reunirá a delegados y delegadas de las 96 asambleas poderosas de América Latina. Será un hecho histórico que permitirá la conformación del sector popular organizado desde la Patria Baja por la emancipación de la Patria Grande.
Por Florencia Ogas para La tinta
El Primer Foro Latinoamericano se realizó en septiembre de 2017 en La Habana, Cuba. Allí confluyeron delegados y delegadas de las asambleas barriales de las villas, favelas y comunidades rurales de Argentina, Uruguay, Paraguay, Brasil, Ecuador, Colombia y México. Las discusiones giraron en torno a la realidad de los países de la región latinoamericana y cómo accionar ante el avance de las políticas neoliberales.
Ese año, empezaba a vislumbrarse un Brasil convulsionado: el impeachment a Dilma Rousseff, la asunción de Michel Temer, ideólogo del golpe parlamentario a la ex presidenta y de las políticas públicas destinadas a debilitar el sistema democrático brasileño. La detención de Lula aún no se había perpetrado. Sin embargo, la coyuntura llevó a definir que el próximo Foro Latinoamericano sería en Brasil. Fue una decisión acertada. El grito de las miles de gargantas que llegarán a suelo carioca, será fundamental para exigir la liberación del referente político con más apoyo popular de cara a las próximas elecciones presidenciales. Otro tema que atravesará el Encuentro será el pedido de justicia por el asesinato de la activista, favelera, lesbiana y concejala por el PSOL, Marielle Franco, asesinada por el aparato criminal del Estado en marzo de este año.
Nacho Levy, referente de La Poderosa, dialogó con La tinta sobre los debates que se esperan en la Cumbre de Base, la situación de Brasil y Lula, las políticas en materia de Seguridad y Defensa que golpean a los barrios más vulnerables de la Argentina profunda y sobre las estrategias de organización popular ante el ajuste económico y neoliberal en la región.
“Somos más de 1500 vecinas y vecinos que vamos desde Argentina, esperamos que sean miles. Llegarán delegaciones algunas más chicas otras más grandes, pero de todos los países de América del Sur acompañados por referentes de Derechos Humanos, del feminismo, de la educación popular, de la comunicación popular. Referencias históricas de un proceso que nosotros valoramos y que nos han formado y además, voces nuevas y caras nuevas para empezar a discutir los desafíos que tenemos en este tiempo para perseguir los mismos sueños que venimos persiguiendo desde hace tiempo”, explica Nacho.
—¿Cómo se vienen preparando para de cara al Foro en Porto Alegre?
El foro es una instancia fundamental para nosotrxs desde la construcción que pensamos en los barrios y en la región desde hace muchísimo tiempo. Al principio, de tanto organizarnos entre vecinos en un barrio, de los barrios más cercanos, y después viendo como se prolongaba naturalmente un nivel de organización comunitaria que estaba inherente a la composición de nuestras villas, de nuestras barriadas, poco a poco se fue replicando la misma dinámica asamblearia, las mismas propuestas de educación popular, las mismas estrategias de trabajo cooperativo en los distintos barrios de la Capital, de la Provincia de Buenos Aires, en las provincias del norte y del sur. Hace tres o cuatro años se pudo terminar de federalizar una idea que teníamos de mirar, de mirarnos y pensarnos para entender y reafirmar que así como no se salvaba una vecina o un vecino solo en un barrio, tampoco se salva solo uno en los recortes fronterizos que están trazados en el mapa y en los cánones de la política tradicional.
Nos parecía necesario que esa idiosincrasia común de la patria grande, de la patria baja, de todos aquellos y aquellas que han sobrevivido y han luchado durante décadas para ser felices por debajo de la linea de la pobreza, se pudiera materializar y manifestar en un grito conjunto, en un movimiento organizado que no demonizara ni desestimara otras estrategias populares de la dinámica electoral de la democracia representativa, pero que a su vez nos permitiera coordinarnos un programa a mediano plazo, en proyectos que nos permitan levantar la participación de los sectores populares, sin tener que resetearnos cada dos años, peleándonos entre nosotros por muchos más temas que los que se suponen nos diferencian a la hora de votar.
Así que desde la unidad de los movimientos sociales, del campo popular, se fue gestando este sueño y se pudo materializar por primera vez el año pasado en La Habana, Cuba, donde la Casa de las Américas y el Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales, contribuyeron y acompañaron al Primer Encuentro Latinoamericano de referentes de La Poderosa, en ese momento de 8 países donde estaba funcionando esa dinámica asamblearia. Ahí en La Habana debatiendo con la juventud cubana sobre las implicancias que pagan nuestros barrios, de un modelo de una propuesta de exclusión, de ajuste, de miseria, de hambre, de pena de muerte en los sectores populares aunque no aparezca en las Constituciones, desde esa plataforma podíamos soñar una enredadera un poco todavía mas grande, y un segundo foro que fuera en Brasil.
—¿Cómo analizan la situación en Brasil y la de Lula en particular?
Nos imaginábamos que iba a ser un tiempo hostil para el pueblo brasileño, aunque no nos imaginábamos este nivel de golpismo salvaje y despiadado que llegara al punto de secuestrar al principal candidato que había elegido el pueblo. Desde ese lugar, se reafirmó la misma utopía que venimos persiguiendo por la positiva. La idea y la necesidad de encontrarnos, que seguramente fue traccionada por todo ese avasallamiento y envestida de la derecha en la región, que en Brasil se expresa con dos gritos que resuenan en todo el continente que son “Marielle Vive” y “Lula Livre”. Nos parece que el encarcelamiento de Lula desenquistó la figura carismática de todo lo que él representa para los sectores populares en Brasil, independientemente de su pertenencia partidaria y de los distintos armados electorales. Y el grito de Marielle, el crimen de Estado de Marielle, el asesinato de una dirigente favelera, negra, socialista, lesbiana, con balas de la policía para dar un mensaje claro que acallara a los pueblos y que se repitiera en distintas formas, en los distintos países de la región.
—Uno de los ejes de debate será la represión estatal. ¿Qué lectura hacen sobre las políticas en materia de seguridad de la ministra Patricia Bullrich?
Desde ya que no consideramos seguridad a políticas que atentan contra los sectores que la denuncian con sus gritos o con sus silencios, que las denuncian con sus estrategias de comunicación y visibilizacion para mostrar el mecanismo sistemático de invisibilidad que le han dado durante un montón de tiempo a todas las barriadas. El Foro se inicia con una caravana en el cumpleaños de Marielle que será este viernes, encabezada por la compañera de Marielle, por referentes de Derechos Humanos de toda la region, desde Pérez Esquivel hasta Pedro Kumamoto, que viene desde México para esa caravana. El Foro cierra con Norita Cortiñas, con Adolfo, con Dilma. Se cierra con Sergio Maldonado y Andrea a pocas horas del aniversario de otro crimen de Estado, el que primero puso a Santiago en medio de un operativo ilegal de parte de esa fuerza de seguridad, y después puso a trabajar a todo el aparato de inteligencia y comunicacional para rematarlo después de haberlo desaparecido, de haberlo empujado a la muerte, rematarlo con ese nivel estigmatizción que padeció el y toda su familia sigue padeciendo. Así que la dinámica del aparato represivo con el que intentan acallar la voz de los que ahí nos encontramos y otras tantas que no pudieron llegar, va a atravesar seguramente todos los paneles.
—Esta semana, el presidente Mauricio Macri y el ministro de Defensa Oscar Aguad anunciaron la colaboración de las Fuerzas Armadas en “objetivos estratégicos de seguridad interior”. ¿Qué implica este anuncio para las barriadas?
Prefectura y Gendarmería disponen de todo el aval, la impunidad y los recursos del Estado para garantizar una sola cosa: que todo aquello que sucede en las villas, en la comunidad, esté muy oculto en los canales a través de los cuales algo de eso podría asomar y cuando asoma, responden como respondió Patricia Bullrich. Con una insólita conferencia de prensa -que no le levantaron ni los medios pro oficiales con los que trabaja permanentemente-, atacando a una organización popular o intentando estigmatizar los pocos mecanismos que tenemos para visibilizar lo que sucede hacia adentro de nuestros barrios. No es una realidad solo de la Capital Federal, ustedes lo saben bien, vienen batallando contra el Código de Faltas, el Código de Convivencia y toda esa normativa a la que solamente le han cambiado el nombre pero no las formas, y sobre todo los dueños y los intereses que representan. Eso venimos padeciendo en cada uno de nuestros lugares. En el Foro va a haber compañeros que vienen de las barriadas de México a contar todo lo que vivieron a lo largo de estos años del genocidio de Peña Nieto, van a estar los padres de los 43 estudiantes normalistas. Parte de lo que se viene padeciendo en la región de manera más invisibilizada, será lo que tal vez cobre más visibilidad en el Foro. A medida que avanzan estas medidas macroeconómicas y los avasallamientos de la derecha, a los símbolos de las reivindicaciones populares los acompaña el recrudecimiento de esas prácticas represivas que van saliendo a la luz.
—En un contexto de ajuste económico feroz. ¿Cómo se organizan desde los barrios, cuáles son las estrategias de resistencia?
Las de siempre, creo que cada vez nos vamos aferrando más a la identidad de nuestros barrios, a la historia de lucha que tiene según las épocas, los tiempos, los matices, los distintos gobiernos. Van habiendo instancias de avance, de retroceso, de resistencias.
Y en momentos como este, donde las compañeras y los compañeros que por ahí tenían un poquito de alcance, de influencia en el marco laboral, territorial, un poder adquisitivo con el que aportar o contribuir a algunos de los espacios en los que participa, cuando todo eso se va licuando porque baja la pobreza, dicen ellos, nosotros decimos que sí, que la pobreza esta más abajo, que los pobres están más pobres, que la clase media ahora también empieza a copar los comedores que están rebalsando.
Nosotros en Zabaleta teníamos dos y ahora tenemos cinco comedores y en ninguno de los cinco alcanza la comida. Creo que en este contexto tenemos que abrir más grandes los ojos para ver de que manera se hace mucho con poco, de que manera se resiste como resistieron las villas toda la vida, sin negociar nunca la capacidad de construir colectivamente, la necesidad de organizarse en comunidad, siendo barrios más azotados a lo largo del tiempo que otros socioeconómicamente acomodamos, donde no existe ni una reunión de consorcio, en nuestros barrios la organización popular ha sido siempre el rumbo. Ahí donde ya nada se puede disimular, donde todo se desborda, donde las escuelas de los barrios vuelven a tener certificado de desnutrición, donde el 25 % de los argentinos no tiene agua, donde el 50 % de los chicos vive por debajo de la pobreza, creo que esas son todas estadísticas inapelables que se pueden ver en carne viva en cualquiera de nuestros barrios. Así que de ahí nacen los gritos y la voluntad que nos va a encontrar en Porto Alegre este viernes.
* Por Florencia Ogas para La tinta / Imágenes: La Garganta Poderosa