Trabajadores del ingenio San Isidro quieren recuperar su fuente laboral
En el mes de enero el ingenio San Isidro, el más antiguo del país, cerró sus puertas y dejó a cientos de salteños sin trabajo. Desde entonces, los obreros reclaman que se reabra la planta de azúcar ubicada en Campo Santo, a 50 kilómetros de Salta capital. Ante la falta de respuestas, ocuparon pacíficamente las instalaciones del ingenio con el objetivo de recuperar su fuente de trabajo.
Por Nano Nusbaum para Retruco
En diálogo telefónico con Retruco, Mariano Cuenca, secretario general del Sindicato de Obreros y Empleados del Azúcar San Isidro (SOEASI), sostuvo: “Nosotros hemos tomado la decisión de recuperar nuestra fuente de trabajo”.
Con esta premisa, el pasado lunes al mediodía los empleados del ingenio San Isidro abrieron las instalaciones y procedieron a ocupar pacíficamente la planta. Con su ropa de trabajo, los obreros ingresaron al predio y manifestaron su irrevocable decisión de defender la fuente de ingresos.
El panorama es muy complicado para los trabajadores porque además del conflicto y la falta de voluntad de parte del Gobierno de la Provincia de Salta, del Gobierno Nacional y de la empresa para buscar una solución, los obreros temen quedarse sin materia prima para procesar, ya que el grueso de la materia prima es provista por los cañeros independientes de la región. Y como la molienda ya comenzó en todo el norte del país, los obreros temen que los productores independientes vendan su caña a los ingenios jujeños.
Se terminó la espera
El gremialista Mariano Cuenca consideró que en este conflicto los tiempos se van acotando. “Luego de cuatro meses de espera para llegar a un arreglo hemos tomado la decisión de tomar nuestra fuente de trabajo”, y sobre la toma aclaró: “Al ingenio lo sentimos como propio y jamás vamos a hacer daño alguno a lo que nos da de comer. Vamos a ir alistando la planta para que pueda funcionar”, expresó el secretario general del gremio de azucareros.
Cuenca contó a Retruco que desde hace tiempo “lo único que hace el Grupo Gloria -de capitales peruanos- es explotar nuestra tierra y vulnerar el derecho de los trabajadores”.
Los trabajadores señalaron que hubo varios grupos interesados en comprar la planta, pero el grupo empresario propietario del ingenio no lo quiso vender. “También le presentamos al Gobierno Provincial y a la Legislatura un proyecto de expropiación que todavía no tuvo respuestas”, declaró.
Por último, el sindicalista indicó que van a tratar de dejar la planta lista para que la misma pueda comenzar a funcionar ni bien se solucione el conflicto. “Esta situación no solamente perjudica a los trabajadores de la planta (más de 750 de manera directa), la situación afectó a cerca de cien mil habitantes del Departamento condenados a la miseria y al hambre”, concluyó.
* Por Nano Nusbaum para Retruco
