Tras la represión, continúan las protestas de los trabajadores de Cresta Roja
Mantenían un bloqueo en la planta de la ruta 205 en repudio a un plan de despidos y suspensiones. Fueron reprimidos y golpeados en un mega operativo que incluyó a 2.000 efectivos de la Gendarmería y la Infantería de la Policía Bonaerense. Hoy continúa la protesta en el marco del ajuste con fuerte presencia policial.
Por Redacción La tinta
Gallo negro, gallo negro,
gallo negro te lo advierto:
no se rinde un gallo rojo
más que cuando está ya muerto.
El conflicto viene de larga data. En el 2015, la empresa avícola Cresta Roja tenía 3.500 empleados pero hacia finales de ese año, los hermanos Rasic, dueños de la firma, la declararon inviable y comenzaron los despidos. Desde ese momento, las movilizaciones, planes de lucha y toma de las dos plantas de la firma (una de ellas ubicada en Ezeiza y la otra en Esteban Echevarría, en la provincia de Buenos Aires) se convirtieron en moneda corriente.
Cresta Roja comenzó un proceso de quiebra “con continuidad”, a cargo de Valeria Pérez Casado. Se abrió así un concurso para vender la firma. La Justicia aceptó la oferta de 121 millones de dólares de parte de la empresa Proteinsa, grupo compuesto por las empresas Ovoprot Internacional S.A., Tanacorsa S.A. y La suerte Agro S.A.
Sin embargo, cuando los nuevos dueños se hicieron cargo de Cresta Roja, los problemas siguieron, junto con despidos y una negación de reincorporar a los trabajadores que ya se hallaban desvinculados de la empresa. Luego pretendían que se incorporen a la nueva razón social sin reconocer su antigüedad, lo cual fue rechazado por los trabajadores.
Les ofrecieron luego indemnizaciones por 15 mil pesos a cada uno, una nueva burla a los trabajadores que rechazaron esta propuesta de la empresa. Los conflictos continuaron, con presencia intimidatorias durante las protestas de los trabajadores.
En noviembre de 2017, una nueva noticia sacudió a los trabajadores de Cresta Roja: el grupo Proteinsa había acumulado una larga lista de cheques rechazados y sus números estaban en rojo.
La última noticia, fue que la empresa presentó un plan que afectaría a más de 800 empleados que serían despedidos. El mismo fue firmado y avalado por el Ministerio de Trabajo de la Nación. Durante 15 días, 300 trabajadores de Cresta Roja estuvieron protestando contra este plan de ajuste en un acampe en la puerta de la planta que el frigorífico tiene sobre la ruta 205.
“Estamos en la calle sin trabajar desde enero. Sin un peso. Y con un montón de plata que nos deben. A muchos les quedaron debiendo las vacaciones y la indemnización. Estamos hablando de que hay gente que tenía 25 o 30 años. Esa plata se la estafaron a todos”, declaró Darío, trabajador de Cresta Roja.
El jueves por la madrugada de la semana pasada fueron desalojados en un mega operativo que incluyó balas de goma, tanques hidrantes, gases lacrimógenos y fuerzas de caballería: “A las 5 de la mañana empezó a llegar Gendarmería. Llegaron con toda la fuerza, con perros, caballos, hidrantes. Dieron la orden de liberar y comenzó la represión. Era un acampe pacífico, no estaba cortada la ruta”, nos explicó Darío quien además manifestó que el motivo del acampe, además del plan de ajuste, es porque hay trabajadores que hace cuatro meses que no cobran: “Estamos además reclamando sueldos atrasados desde el mes de enero”.
Tras el violento desalojo, los trabajadores decidieron volver a la planta a protestar, con la certeza de que el gallo rojo no se rinde.
* Por Redacción La tinta