El poder político de La Rioja, otro buen alumno del patriarcado
El caso de Emilia hace tambalear el régimen político riojano. Políticos y jueces hacen silencio cómplice.
Por Belén Romero para La tinta
La joven estudiante de la Universidad Nacional de La Rioja (UNLaR), Emilia Alarcón, denunció hace casi un año a José Simán, sobrino de Carlos Menem e hijo de un ex candidato a gobernador por el PJ, por violarla mientras dormía. Hay un hisopado que así lo demuestra, Simán fue el autor del hecho, pero pareciera que para el Juez Barría no es suficiente prueba, y por ello no hay orden de detención todavía.
En junio de este año, Emilia, apoyada por organizaciones, tuvo la fortaleza de dar a conocer el resultado del hisopado que incrimina a José Simán, pero la Justicia riojana ampara a los poderosos. La abogada de Emilia, Paola Mébar, viene denunciando varias irregularidades en la investigación del caso, y solicitó la recusación de Barría, principalmente por sus vinculaciones con el poder político, pero la Cámara le denegó ese pedido.
¿Quién es Daniel Barría?
Desde que entró al Poder Judicial, el juez es cuestionado por las Madres del Dolor y por Susana Trimarco. Fue uno de los defensores de Liliana Medina y de su hijo «Chenga» Gómez, propietarios de un prostíbulo en La Rioja y que a su vez estuvieron procesados y detenidos por la desaparición de la joven tucumana Marita Verón, hija de Susana Trimarco. Medina y Gómez, obtuvieron su libertad tras el pago de una abultada fianza.
A fines del 2007, la Cámara de Diputados de la provincia designó a Barría como juez de instrucción del 2° turno de la capital; aunque el abogado aún no asumió por el receso de la Legislatura y el Poder Judicial.
Susana Trimarco declaró a “El Independiente”, diario riojano, que Barría fue el abogado de la «mafia vinculada con la prostitución» y que «es una vergüenza permitir que esta persona sea juez”.Además advirtió que participará de una protesta de las Madres del Dolor de La Rioja, para repudiar la designación de Daniel Barría.
Por su parte, Sara Canciani, una de las Madres del Dolor de La Rioja, también se expresó en contra. Sara es la madre del joven Roberto Agüero, asesinado a balazos por un policía que tuvo como abogado defensor justamente, al ahora juez Barría. «No me puedo explicar cómo podré pedir justicia por la muerte de mi hijo cuando justamente él fue el abogado defensor», explicó Sara, y aseguró que para ella la designación es una cuestión política.
Daniel Barría también es quien ordenó que se prohibiera la reproducción del video del ex gobernador abusando de una menor. La complicidad de Barría con el régimen que gobierna la provincia hace cuarenta años es un hecho indiscutible.
En paralelo a eso, Carlos Menem, primo de la abuela de José Simán, se presenta como candidato a Senador por el PJ otra vez, en busca de los fueros quizás. Hasta el propio Beder Herrera dijo impunemente que “si Carlos no era candidato, le guardaremos un lugar en el Tribunal Superior de Justicia”.
Así de grotesca es la política riojana, que apaña a proxenetas y violadores y en donde no existe una independencia de poderes.
El 19 de Noviembre próximo, cuando se cumpla un año del hecho que denunció Emilia Alarcón, el movimiento de mujeres proponen movilizarse. Hay que visibilizar este caso que pone en el banquillo a todo un régimen político, así como lo fue el caso de María Soledad en Catamarca o el de Paulina Lebbos en Tucumán.
*Por Belén Romero para La tinta / Foto: Colectivo Manifiesto.