Patota de la UTA agredió a estudiantes de la UNC
Un grupo de estudiantes que intentaban realizar un mural artístico frente a la sede sindical, fueron amenazados por una patota de la Unión Tranviarios Automotor. “Se merecen que los fusilen contra un paredón”, expusieron los custodios de la burocracia.
En el marco de la asamblea Interfacultades de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC), se conformó un grupo de estudiantes organizados para mostrar a través del arte las injusticias sociales datadas por la codicia y el egoísmo de intereses económicos de los empresarios, el estado y la burocracia sindical.
Tras semanas de organización e incluso realizar un festival para recaudar fondos, el grupo se dispuso a realizar este sábado un mural frente a la sede de la Unión Tranviarios Automotor (UTA) ubicada en avenida Vélez Sársfield. Dicho inmueble fue durante semanas, ícono de la lucha de las y los choferes que se enfrentaron a los negociados entre la burocracia sindical, la Fetap y la Municipalidad de Córdoba.
El objetivo de la intervención artística frente a la UTA era denunciar la intervención del gremio y pedir la reincorporación de las y los choferes despedidos. Pero una patota mandada por la burocracia sindical agredió a los jóvenes y evitó la realización del mural.
“Sin llegar a la mitad de la pared cubierta, cinco hombres de la patota sindical se acercaron a uno de los compañeros exigiendo que nos retiremos, luego de preguntarles por qué y replicarles que era nuestro derecho expresarnos se acercaron entre gestos prepotentes alegando que éramos unos mocosos que no sabíamos nada, que ellos eran perteneciente a la UTA, que borráramos todo acerca de los conflictos de los colectiveros o sino nos iban a sacar a las patadas. En ese momento llegaron dos hombres más”, expresó una de las participantes.
“Ustedes los zurditos de mierda; váyanse pobres del orto; no saben nada mocosos; se merecen que los fusilen contra un paredón”, fueron algunos de los insultos que recibieron los manifestantes mientras eran retirados del lugar por la fuerza.
La patota no sólo amenazó al grupo de jóvenes, sino que los corrió del lugar por la fuerza y arrojó pintura sobre la parte del mural que habían avanzado.
«Todo esto en el marco de que en el día viernes se llevó adelante una asamblea en el gremio (armada por esta burocracia) con la intención de despedir a los delegados y para frenar el proceso en lucha que se viene llevando desde las bases», recordaron los jóvenes.
Huelga de hambre de las trolebuseras
Cinco trolebuseras despedidas tras el último paro de transporte iniciaron el viernes una huelga de hambre frente a la Municipalidad de Córdoba para demandar ser reincoporadas.
“Nos autoconvocamos para hacer una huelga de hambre hasta que Ramón Mestre nos atienda. Soy madre soltera y tengo cinco hijos, pago alquiler. Es una necesidad volver a trabajo”, expresó Graciela desde una de las carpas instaladas frente al Palacio 6 de Julio.
* Por Redacción La tinta / Fotografía: Colectivo Manifiesto
