Liberaron a Dahyana Gorosito
La joven de 21 años se encontraba en prisión desde hace un año. Presa de una justicia machista y patriarcal, espera ser juzgada por haber “omitido” salvar a su hija. Este miércoles salió en libertad. Aguardará el proceso en donde siempre debería haber estado: en la calle, junto a nosotras.
A fines de septiembre del año pasado, y luego de un entramado de ocultamientos, malos accionares policiales y del poder judicial -rodeados de discursos mediáticos violentos y machistas-, se imputó a Dahyana Gorosito y Luis Oroná por homicidio calificado agravado por el vínculo. Lo que se le atribuye a Dahyana es haber “omitido” salvar a su bebé, ya que Luis Oroná sería el autor del hecho. Desde ese día, Dahyana vivió presa e imposibilitada del contacto con su hijo pequeño, Luisito.
Su abogada Melina Canesini, integrante del Espacio Jurídico Deodoro Roca, explicó a fines del año pasado: “Ella tiene a su hija en condiciones inhumanas, que la fiscalía no contempla, no lo tiene en cuenta. Y espera un accionar heroico de una madre que está en estado puerperal, que es víctima de violencia y que no sabía qué iba a hacer su pareja con esa beba que en definitiva termina muriendo no por una acción concreta, sino por hipotermia, cuando el padre se la lleva”.
Dahyana es víctima de violencia institucional y de un poder judicial machista, que la retuvo en prisión preventiva por un año, sin contemplar su historia de vida llena de violencias, su sometimiento en un hogar en donde la única familia que tenía era la de su pareja violenta. Dahyana parió sola y en condiciones de violencia extrema, y para la fiscal Mercedes Balestrini eso es “omisión”. Omisión de sus “deberes de madre”. Omisión de sus “deberes de mujer”.
Campaña #LibertadparaDahyana
A mediados del año pasado, diversas organizaciones de Córdoba y de Unquillo, la ciudad natal de Dahyana, se unieron en una mesa de trabajo para exigir su libertad. El pedido resaltaba la necesidad de que la joven vuelva a su casa con su hijo, con el que no tenía contacto desde que estaba en prisión.
La gran movida mediática y social no fue suficiente para conseguir su libertad antes de las fiestas, pero el repudio -que incluyó a legisladores provinciales, nacionales, organizaciones latinoamericanas de derechos humanos, entre otros tantos- logró que el poder judicial comience a prestar atención al caso desde una perspectiva de género.
Gracias a la lucha y organización, hace unos meses, pudo retomar el contacto con Luisito. Y ayer, Dahyana salió en libertad. Parecería que los jueces comienzan a poner luz sobre los hechos y a reconocer que las condiciones en las que Dahyana fue obligada a parir a su hija fueron violentas e inhumanas. Un hecho clave que la fiscal pasó por alto. Un hecho que eligieron negar.
Hoy, Dahyana ya no está sola.
Hoy somos muchas a su lado.
Hoy, nuestro corazón está en libertad. #Dahyanalibre
* Fotografía La tinta.
