La protesta no tiene protocolo

La protesta no tiene protocolo
15 febrero, 2017 por Redacción La tinta

Por Pablo Ramos

Nace de la indignación, la rebeldía, el inconformismo. Es el espíritu que mueve la historia frente al poder que conserva los privilegios y reproduce las injusticias. Protestar es expresarse en libertad. Decir No, Basta, Nunca Mas. Es ponerle límites a la impunidad, la corrupción y la mentira.

Privilegiar la circulación de autos y personas, sobre el derecho a protestar y a la integridad física de quienes ponen el cuerpo, es un hecho antidemocrático. Peor aún cuando se autoriza la represión con armas de fuego, cuando se deja la negociación y el uso de la fuerza en manos de policias y funcionarios políticos. No media la justicia, la razón compleja de la ciudadanía, el diálogo y la paz social. Se impone el poder con sus armas y sus intereses, se acalla, se disciplina, se criminalizan las formas de protesta ciudadana.

Este país está hecho de grandes injusticias, de abismales desigualdades, de crimenes de lesa humanidad. Acá murieron decenas de miles durante la dictadura civico-militar, pero también tenemos mártires de las luchas sociales en democracia.

Teresa Rodriguez en Cutral Co
Victor Choque en Usuahia
Anibal Veron en Tartagal
Ojeda y Escobar en Corrientes
los casi 40 mártires que salieron junto a miles para derrocar a De La Rua
Kosteki y Santillán en Avellaneda
Carlos Fuentealba en Neuquén
Mariano Ferreyra en Capital
Cristian Ferreyra en Santiago
Las víctimas del Indoamericano
Los Qom asesinados en Formosa
y la lista de muertos en democracia sigue

Lamentable pero heroica, protestaban para conseguir trabajo o mejores condiciones laborales. Pedían que se respetara la tierra que habitaban, exigían que reconozcan sus derechos humanos.

Ellas y ellos son emblemas de la dignidad rebelde. Es la memoria de su vida en pie la que nos interpela, nos reclama ser atentos y solidarios, poner la urgencia cotidiana en perspectiva histórica.

Comprender que la marcha hacia un mundo más justo no se hace en autos veloces, sino en cuerpos que se asocian para despertar conciencias, reclamar derechos y construir de a pie, en el llano, en la calle, un horizonte que nos incluya libres e iguales

*Por Pablo Ramos, editorial de Subversiones / Fotos: Fotografía de Prensa

Palabras claves: protesta

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