
Árboles que fundan desiertos
El Chaco Paraguayo es un tesoro acechado. Amplias tierras pobladas en algunas partes por comunidades indígenas; en otras, por empresas del agronegocio, donde la deforestación avanza como la violencia, a pasos agigantados, y la paz se negocia con promesas. La última: eucaliptus. Árboles que ofrecen unos pesos, pero consumen mucha agua en un lugar donde no abunda. Por Juliana Quintana