
Netflix, feminismo y confusión
El feminismo de moda no es feminismo, es el mercado sabiéndonos leer y haciéndonos creer que necesitamos tal o cual cosa para crecer como sociedad. No se trata de pelar el feministómetro, sino de afinar la crítica. Consumamos todo lo que queramos, pero identifiquemos, por lo menos, la intención del mercado capitalista de apropiarse de luchas que no le son propias para hacer billetes que ni en figuritas vemos y que -como efecto colateral- neutralizan las luchas. Por Flo Straso.