
Carne drogada
Se ve roja brillante y reluce con el plástico encima como fresca. Pero oculta un pasado atroz que involucra adulteraciones como hormonas y anabólicos con la vaca en vida, y aditivos para que el producto final luzca mejor de lo que es cuando la vaca ya está muerta. En esta nota, el bistec bajo la lupa. Una recorrida entre criaderos y expertos y controles que nadie hace para descubrir que eso que consumimos tal vez no pueda siquiera llamarse carne. Por Paula Mónaco Felipe