
Gildo y el feudo
Formosa es un feudo con un capataz que gobierna desde hace 26 años. Gildo Insfrán tiene estirpe de vitalicio en medio de los modelos dominiales como el de Santiago del Estero, donde la pobreza generalizada no impide la inauguración de un estadio de lujo que costó 1.500 millones de pesos. Gildo parece ser eterno como el dios que gobierna el universo para siempre. Al mando de un Estado que emplea, cesantea, reprime, alimenta, destierra, fabrica pobres y, luego, los hace clientes. Por Silvana Melo