
El sobreviviente
Ricardo Capelli caminaba junto a su íntimo amigo, el padre Carlos Mugica, cuando ambos fueron baleados por la Triple A. El recuerdo de aquel momento y el por qué tardó tanto en darle el nombre del asesino a la justicia. La historia de cómo dos jóvenes antiperonistas se acercaron a Montoneros. Por Sofía Moure