
Los ojos del odio
Alfred Eisenstaedt era reportero de la Associated Press en Berlín y corresponsal de la revista Life; en septiembre de 1933, fue a Ginebra a cubrir la liga de las naciones. Allí se encontró Joseph Goebbels y comenzó a retratarlo, alguien le avisó al ministro de propaganda del nazismo que Eisenstaedt era de origen Judío y su gesto cambió. Un retrato que logró desnudar a un ser nefasto.