Cuando éramos niños, tercera edición
Con dos funciones diarias, a la siesta y a la noche, y para compartir con la prole (propia o ajena) o con quienes crecimos en los 90, el querido Cineclub Municipal propone, en estas vacaciones de julio, una selección de películas vintage que hacen honor a las emociones que nos despertaron en aquellos años felices.
Por Soledad Sgarella para La tinta
El ciclo especial para las vacaciones de invierno del Hugo del Carril es una invitación directa a volver a pasar por el corazón una serie de filmes que ya nos hicieron emocionar cuando teníamos escasa edad. Martín Emilio Campos programó, del lunes 15 al miércoles 31 de julio, nueve películas para disfrutar: Matilda, Laberinto, Los Locos Adams, Mi primer beso, Llegan los Muppets, Marcianos al ataque, ET y Jim y el durazno gigante.
“¿Quién no está dispuesto a volver a sentir, como en aquellas tardes, que las posibilidades son siempre infinitas?”, preguntan desde el Cineclub. Campos, cuenta a La tinta, desde sus saberes y emociones cinéfilas, que es un ciclo que programó no simplemente desde la nostalgia, sino porque son películas buenas y “que llegaron a nuestras vidas en un momento anterior, en un momento pre-cinéfilo, cuando éramos chicos, con una recepción, muchas veces, acrítica. Y, generalmente, son filmes que ni la crítica ni la gente termina tomando mucho en serio y es también una buena oportunidad de volver a verlas y volver a verlas de grandes, viendo qué pensamos y qué sentimos con ellas.
Obviamente, siendo niñes, hay muchísimas situaciones que tienen que ver con contextos políticos, de género, sociales, que se nos pasan desapercibidas y volver a ver las pelis con una mentalidad más madura hace que también las podamos descubrir desde otros puntos de vista. No olvidemos que, a pesar de ser películas que nosotres atesoramos por una cuestión de aventura y de fantasía, o de ficción que es totalmente conmovedora, también hay una expresión de mundo que se esconde ahí”.
Campos también nos aclara algo muy importante: en el horario de siesta, las pelis serán dobladas al español. Esto hace mucho más accesible el disfrute y abre el público del Cineclub.
Agrega que se encontró con que las versiones originales estaban en un formato apaisado de pantalla donde cabía mucha más información, más detalles, un universo visual que no podíamos apreciar en los televisores de nuestra infancia, otra razón muy importante por la cual ir a re-verlas. “Me crié a mediados de los noventa y a estas pelis no las vimos en salas de cine… las veíamos alquiladas en el videoclub y es una experiencia totalmente renovada cuando las vemos en pantalla grande”, dice, contento.
Por último, el programador de Cuando éramos niños remata: “es un ciclo que tiene la virtud, el gancho, de que puede ser apelativa a gente de distintas edades… también a gente a la que ya nos empiezan a salir las canas. Volver a encontrarnos con esa peli, pero también el deseo de compartirlo con nuestres hijes, sobrines, con gente nueva y saber que es un nuevo vínculo posible. Creo que eso hace que sea algo bastante especial o que, muchas veces, no es común conseguir. Parece súper divertido -y capaz necesario- y hasta es una forma de acercar gente nueva al cine, que vuelvan a las salas y que apuesten por este tipo de pelis y este tipo de prácticas: ir al cine, acompañado, y arriesgarse”.
Especial vacaciones de invierno
Del lunes 15 al miércoles 31 de julio. Las películas de las 15:30 hs serán proyectadas doblabas al español latino, mientras que las funciones de las 23:00 hs se proyectarán en idioma original y subtituladas al español.
Chequeá días y horarios en: https://cineclubmunicipal.org.ar/vacacionesinvierno/
* Por Soledad Sgarella para La tinta.
