Valeriano: un fake contra lo bienpensante
Este viernes 24 a las 21 hs., se presenta en el Centro Cultural Graciela Carena un cuaderno que compila textos de Diego Valeriano, en un formato “conversación pública” con la presencia del autor y moderada por Pablo Ramos y Claudia Huergo.
Por Soledad Sgarella para La tinta
Valeriano es de esos que escriben y logran, en el mismo instante, que tengas vergüenza de hacerte la progre, pegarte un chasqui de angustia en medio del pecho o hacerte llorar de emociones diversas mientras describe, por ejemplo, una esperada precandidatura.
Diego Sztulwark afirma (en el prólogo del cuaderno) que el autor muchas veces puede ser leído como un provocador o un nihilista, “cuando es el último de los poetas románticos de la presencia”. Mientras, el propio Valeriano nos dice -sin ninguna seguridad- que escribe para ciertos y ciertas cómplices, que escribe porque frente a los que opinan le gusta fabular y que escribe -un poco- para perder la forma humana.
El colaborador de La tinta y de Lobo Suelto viene el viernes al espacio cultural de la calle Alvear convidado por Emosido Engañado, “un grupo de estudio informal de Córdoba, de miembros variables, que estudian cosas que les interrogan”, según la descripción que hacen los propios participantes. A la conversación abierta también invitan el Colectivo Cordobés de Psicólogxs Comunitarixs, el Ciclo de Cine Raros Somos Todos y el programa de radio El último proletario.
La psicóloga y escritora Marina Chena es una de las congregadas a compilar y editar este cuaderno y nos cuenta: “algunos de los textos que seleccionamos ya han sido publicados y los pusimos juntos, con algunos criterios bastante laxos en verdad pero que así reunidos tienen una densidad distinta. Si bien son muy potentes en sí mismos, puestos juntos producen un efecto de reverberancia, de caja de resonancia, se van significando o resignificando unos a otros, se intensifican.
Reunir los textos en un formato como este es un poco salvarlos de la velocidad con que todo se procesa en las redes sociales, y aunque es verdad que son un poco en sí veloces y tienen un ritmo muy agitado, nos parece importante poder proponer una pausa, detenernos a prestar atención”.
El evento promete ser un espacio de encuentro, y según les organizadores, es la invitación a una fiesta entre amigos. «Mueran por coger» es, fundamentalmente, una excusa “para que esos textos, que son tan vitales, tengan una oportunidad de ponerse en diálogo con lectoras y lectores, que salgan a la cancha y ladren”, con una bienvenida de la banda local Esencia, y con Ramos y Huergo tirando algunas líneas de conversación.
Valeriano es uno de los colaboradores que más publicamos en La tinta. Probablemente porque coincidimos con Chena cuando nos dice que “es una voz muy interesante, no solo en su faz beligerante (que ya en sí misma valdría la pena para publicarlos) sino porque, en cierta forma, resensibiliza la escena social colectiva y te diría, política. Vos poder estar de acuerdo o en abierto desacuerdo con lo que dice, pero hay algo a nivel corporal, visceral, que se mueve con su lectura».
Todo ese runflerío que ciertos sectores desprecian con tanta fuerza aparecen en su escritura con una vitalidad que no puede no afectarte, es como que te toca y a veces produce incomodidad y a veces expresa una ternura inmensa. Valeriano aporta incluso desde ese mismo registro más bien corporal, o visceral, a interpelar un cierto consenso bien pensante.
«Es fácil decir Macri gato o gobierno de chetos meritócrata. Más difícil es cuestionar la progresía -fundamentalmente intelectual- y ahí es donde más posibilidades hay de romper ese sentido común, estabilizado en un conjunto de buenas intenciones. Creemos que es ahí donde Valeriano hace mella”, dice Chena.
El prólogo de Sztulwark empieza con un contundente “amor a los reventados” de Valeriano.
Y aquí volvemos a coincidir con Chena. Esa concluyente frase “es una imagen muy acertada: no es una reivindicación ideológica, es una profunda alianza afectiva con esas vidas”.
Nos vemos el viernes.
► «Mueran por coger» de Diego Valeriano. Se presenta el viernes 24 a las 21 hs. en Emosido Engañado (Alvear 157).
*Por Soledad Sgarella para La tinta. Fotos: Marina Chena.