Día Internacional de les Maquilladores
En el marco de este día, la Red TEMID inauguró ayer un ciclo de charlas en vivo junto a dos maquilladoras: Patricia Avila y Camila Rosas. Estas profesionales compartieron sus experiencias y construcciones estéticas, artísticas y políticas en torno a lo que implica maquillar y ser maquillades. En esta nota, delineamos la mirada con la intención de celebrar a quienes son artífices de tanta magia: les maquilladores.
Por Fernanda Albornoz para La tinta
Maquillaje social, artístico, para cine, para teatro, para tv, el tranqui de todos los días, el divain para el saturday nite, el impecable de los casamientos (sí, la gente se sigue casando), el de los 15 a tono con el vestido, el que nos permite escondernos, mostrarnos, contar historias y crear mundos.
Durante una hora de Vivo transmitido desde el Instagram de Red TEMID, compartimos una charla donde se habló del maquillaje como lenguaje, como posibilidad de transitar la otredad y sumergirnos en infinidad de experiencias estéticas y artísticas.
Trabajar en Red
La Red TEMID nace desde la unión y la autogestión de diversas mujeres e identidades disidentes, trabajadorxs del área técnica artística de la ciudad de Córdoba y de localidades del interior de la provincia.
Uno de los objetivos fundantes, fue el deseo de generar espacios de encuentro donde potenciar y compartir los saberes individuales para crecer colectivamente. Así surgió la propuesta de concretar esta instancia como el puntapié inaugural de una serie que visibilice el trabajo de las diversas disciplinas que confluyen en la Red.
Suena una cajita musical y comienza el Vivo. Quien da la bienvenida y oficia de anfitriona es Mariela Ceballos, actriz, iluminadora y maquilladora en construcción. Nos cuenta que las invitadas y protagonistas de la charla tienen muchas cosas en común aparte de compartir el título de maquilladoras profesionales: son sureñas, Camila Rosas es oriunda de Bariloche y Patricia Ávila de Río Gallegos. Las dos egresaron de la Escuela Superior Integral de Teatro “Roberto Arlt” de la Universidad Provincial de Córdoba; y trabajan para teatro y cine. Patricia es también mascarera teatral y Camila es escenógrafa y ha trabajado para televisión. Ambas tienen muchos años de experiencia y coinciden en continuar sumando herramientas que potencien lo que tanto aman hacer. En palabras de Camila: «Me sigo formando, la formación es eterna».
El Maquillaje como lenguaje, herramienta y profesión
Comienza la charla y la presentadora dispara el famoso ¿Cómo llegaron al maquillaje?
Patricia arranca diciendo: «Se fue dando. En un momento me acerqué al trabajo con máscaras y me voló la cabeza. Encontré ahí un montón de cuestiones que eran externas incluso al objeto, de aportes que podía hacer a la escena a partir del trabajo con máscaras. Me empecé a dar cuenta en el estudio y durante las prácticas de que me gustaba mucho el maquillaje pero no sé si lo había pensado tan profesional al principio».
«Hice pasantías en el Teatro Perón y ahí me gustó mucho el trabajo sobre los otros, la posibilidad de intervenir en otra persona. Lo que más me gusta es la práctica, que te vengan muchas personas de golpe y que tengas que resolver. Ese caos que la mayoría de la gente odia, creo que nosotras lo amamos, es donde encuentro una potencia, una energía y la posibilidad de que algo salga y salga bien», dice Patricia Ávila.
Camila responde a la misma pregunta: «Empecé estudiando escenografía. Con un grupo de amigos nos fuimos a un garage y empezamos a probar cosas. Nos gustaban los efectos especiales y hacíamos bombitas de sangre. Fue un momento donde el zombie estaba muy de moda y nos pusimos a jugar».
«Un amigo tenía una ballesta así que poníamos en la pared distintas bolsas de sangre y veíamos como caía, las intensidades. Ahí nos llaman para hacer efectos especiales en un corto, vamos y no había nadie que maquille. Dije, bueno, lo voy a empezar a hacer. Fueron horas de YouTube, practicando en mi casa, agarrando a mis amigas de modeles y jugando. Ahí me di cuenta de que esto me gustaba mucho», cuenta Camila Rosas.
Patricia continúa compartiendo su experiencia: «Me dí cuenta de que una cosa es maquillar y otra es trabajar del maquillaje. Ahí necesitás un montón de otras herramientas que tienen que ver con cómo trabajás en Córdoba de manera autogestiva y cómo llevás adelante ese trabajo. Decidí profesionalizarme y empecé a estudiar, primero en Arias Bazán y luego en la Figueroa que me sirvió para incorporar toda la cuestión plástica que es súper importante en el teatro. En algún momento, tomé la decisión de dedicarme específicamente a esto».
Protocolos de bioseguridad
Ambas entrevistadas coinciden en la necesidad de aplicar una serie de procedimientos determinados por los protocolos de bioseguridad, con el objetivo de garantizar la salud integral de les maquillades, evitar la contaminación cruzada y cuidar los elementos de trabajo. Como dice Camila: “Seamos conscientes de que trabajamos sobre un órgano vivo que es la piel. Es importante cuidarla”. Comparten algunos tips de cuidados y también cuáles son los elementos imprescindibles para armar un maletín básico de maquillaje: chapita, espátula, brocha, pincel chato, pincel fino, bases cremosas de colores primarios, más negro y blanco, limpiador en seco, delineador en gel, polvos y sellador en aerosol y fluidificador de texturas. En general, todos estos insumos se pueden adquirir en nuestra ciudad.
En el medio del Vivo, la anfitriona propone varios juegos y se arma revuelo entre todes les participantes, cuando toca adivinar el nombre de personajes con pistas y dibujos que ella misma hizo para la ocasión. La charla continúa de manera amena y generosa, hay mucha experiencia y ganas de compartir.
«El maquillaje es también que cada une haga propia la manera en que elegís expresarte a partir de, más que esta idea de que es algo que ya viene dado, que se hace de una determinada manera. Ahí está el trabajo artístico de entender que, más allá de lo cultural, eso ha cambiado un montón a lo largo de la historia y ha cambiado por personas como nosotras», sostiene Patricia.
Camila nos recuerda con precisión que todo lo que está en escena es un lenguaje y se lo tiene que tomar con la misma importancia. Todo dice. El maquillaje es un lenguaje más y si hay una cara totalmente lavada, es por una decisión estética para que sea así.
Cuando el chat se habilita, aprovecho la oportunidad para preguntar qué piensan de lo que históricamente relaciona el maquillaje con la mujer, las mujeres, la feminidad, con la posibilidad o necesidad para vernos más lindas. ¿Cambió ese concepto en los últimos años? Pensando en las construcciones de los feminismos y transfeminismos, ¿se ha resignificado esa cláusula original de que el maquillaje es o era para un género determinado?
Es la presentadora la que rompe el primer mito con el dato de que el maquillaje fue utilizado primero por hombres y linkea a la actualidad con una reflexión de que los actores hombres están más accesibles a la idea de que se les ponga una base, cuidarse el rostro y tener una conciencia del maquillaje que se les va a aplicar. Patricia habla de pensar la imagen como una cuestión simbólica, en David Bowie que hace un montón de años ya se maquillaba y en nuestros cuerpos como un soporte artístico.
Camila hilvana de manera amorosa, todas las ideas y construcciones en esta reflexión final: «Los estereotipos de belleza van cambiando por la época. En los últimos tiempos, distintas comunidades han acercado y reivindicado el maquillaje de otra forma, la belleza mirada desde otro lugar. No sólo esperamos que cambien los estereotipos, y creo que hay todo un movimiento que impulsa a que eso sea así; sino que también vamos tomando la posta del maquillaje y la estética, otras diversidades, otros cuerpos, otras identidades para hacerlo propio. La belleza no tiene que ser excluyente, al contrario: todes somos belles».
Ayer fue el Día de les Maquilladores, lo celebramos y damos de corazón un abrazo apretado para quienes apuestan a esta profesión con todos los matices, intensidades y colores que la diversidad construye cada día.
*Por Fernanda Albornoz para La tinta.
