En Ecuador, despenalizan el aborto en casos de violación
Luego de varios años de lucha, el movimiento de mujeres ecuatoriano logró la despenalización del aborto en casos de violación. La decisión fue tomada por la Corte Constitucional.
Por Redacción La tinta
La Corte Constitucional de Ecuador aprobó ayer la despenalización del aborto en casos de violación, un hecho calificado como histórico por diversas organizaciones de mujeres. Con siete votos a favor y dos en contra, la Corte resolvió considerar inconstitucionales dos artículos del Código Orgánico Integral Penal (COIP), referentes al aborto. En ambos artículos, se estipulaba que el aborto solo era permitido si la vida de la mujer estaba en peligro o el embarazo fue producto de una violación a una mujer con discapacidad mental, informó la agencia de noticias EFE.
Desde tempranas horas del miércoles, colectivos en defensa de los derechos humanos en Ecuador se congregaron en las inmediaciones de la Corte Constitucional para demandar la despenalización. Ana Vera, directora de la organización Surkuna, declaró que la decisión de la Corte es una oportunidad trascendental, porque permitirá que niñas, adolescentes y mujeres en general dejen de ser criminalizadas, además de no ser sometidas a maternidades forzadas. Vera agregó que su país debe apostar por la justicia social, la reparación y la no repetición, permitiendo que niñas y mujeres víctimas de violencia sexual accedan al aborto legal.
La cadena Telesur reseñó que, en agosto de 2019, la Fundación Desafío, la Coalición Nacional de Mujeres del Ecuador (CNME), el Frente Ecuatoriano por las Defensas de los Derechos Sexuales y Reproductivos, y el colectivo Mujeres con Voz presentaron una demanda al respecto. Ese mismo año, la Asamblea Nacional no dio paso a la modificación del artículo 150 para incluir la despenalización del aborto en casos de violación. Tampoco se pronunció el presidente Lenín Moreno, lo que obligó a estos colectivos a recurrir ante la Corte Constitucional.
Conocido el fallo, desde la CNME consideraron que “la despenalización del aborto por violación es un avance necesario, aunque incompleto”. En un comunicado, expresaron que «las mujeres ecuatorianas seguiremos luchando para ejercer el derecho a ser libres de disfrutar, defender, proteger nuestro cuerpo y salud integral”.
En un breve editorial publicado ayer, la revista ecuatoriana Crisis manifestó que “obligar a continuar un embarazo no deseado es una forma de tortura, más aún si ha sido producto de una violación”. “Esta es una demanda mínima, por la que inclusive organismos internacionales como la ONU han hecho llamados de atención al Ecuador, por la falta de políticas públicas que cuiden y garanticen la vida de las sobreviviente de violación en estado de gestación, y que deseen abortar”, agregaron desde la publicación.
La decisión de la Corte Constitucional también fue duramente criticada por referentes e instituciones anti-derechos. María de Lourdes Alcívar, esposa del presidente electo Guillermo Lasso, escribió en su cuenta de Twitter: “Oremos a Dios para que no sea aprobado el aborto en nuestro país. Es un asesinato. Que nos duela el corazón solo el decirlo. Todos tenemos derecho a la vida. Madres, padres, eduquen en valor a sus hijos desde pequeñitos, a sus hijas, desde que nacen para que sepan respetar la vida”.
Por su parte, el lunes pasado, el presidente de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana (CEE), monseñor Luis Cabrera, remitió una carta al titular de la Corte Constitucional en la que le manifestaba que “el crimen de la violación no se soluciona con otro crimen”.
El diario ecuatoriano El Telégrafo indicó que, según datos del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC), en promedio, cada año 2.181 niñas menores de 14 años paren en Ecuador, “todas ellas víctimas de violencia sexual desde un criterio legal, ya que el artículo 171 del Código Orgánico Integral Penal establece que es una violación». Los datos del Ministerio de Salud Pública revelan que el 80 % de embarazos en niñas menores de 14 años es producto de violencia sexual y los demás fueron consecuencia al menos de estupro.
Tras el fallo, ahora la Corte Constitucional tiene dos vías para que su decisión sea respetada: exigir a la Asamblea Nacional la reforma de los dos artículos o emitir una sentencia con plazos e indicaciones para la aplicación.
*Por Redacción La tinta / Foto de portada: Carlos Granja Medranda
