Organizaciones sociales y religiosas hacia un pacto de diálogo, respeto y cuidado
“Paz, pan, tierra, techo y trabajo” fue el lema de la jornada organizada por el colectivo Común Unión, en la que participaron organizaciones sociales, movimientos populares y comunidades religiosas que trabajan en la construcción de un «Pacto de Diálogo, Respeto y Cuidado». Un espacio de encuentro cordobés para la desestigmatización y el cese de la persecución a los espacios que trabajan en los barrios.
Común Unión es un colectivo integrado por diversas organizaciones sociales, movimientos populares y comunidades religiosas de la ciudad de Córdoba que, desde 2014, se convocan ante la creciente violencia institucional y la estigmatización de la pobreza. “Junto a comunidades creyentes de diversas expresiones religiosas, que conocemos la práctica de las organizaciones sociales populares porque compartimos territorios, tareas, cuidados, preocupaciones y acciones, impulsamos una jornada de trabajo conjunto con el objetivo de comenzar a construir un camino hacia un ‘Pacto de Diálogo, Respeto y Cuidado’, que nos permita defender con fuerza la vida democrática, cuidando a los sectores más perseguidos y castigados”, expresaron desde el colectivo.
Se realizó el pasado sábado 20 de julio la Jornada de Diálogo Social Ecuménico e Interreligioso “Paz, pan, tierra, techo y trabajo”. Participaron en la mesa de diálogo el cardenal arzobispo, Ángel Rossi; Mercedes Ferrero, de Trabajadores Unidos por la Tierra; Iván Córdoba, de UTEP; Esteban Gómez, obispo de la Iglesia Anglicana Libre Internacional, y Adriana Ochoa, referente de organismos de derechos humanos.
En diálogo con La tinta, Natalia Rodríguez, integrante de Común Unión, coordinadora del área de diálogo ecuménico e interreligioso de Católicas por el Derecho a Decidir, y parte del equipo que organizó el evento, expresó algunas de las reflexiones que dejó el encuentro. “Rossi hizo hincapié en la cultura del cuidado, en la importancia de salir al encuentro y al diálogo con creatividad y valentía, en línea con lo que viene planteando el papa Francisco, que llama a trabajar con movimientos y organizaciones sociales comprometidos con los sectores más empobrecidos. Llamó también a combatir el virus de la indiferencia, destacando la enorme tarea que llevan a cabo todos los movimientos populares presentes”.
Iván Córdoba, de la UTEP, planteó los múltiples desafíos que enfrentan en los territorios y habló sobre el proyecto de ley de emergencia alimentaria que están elaborando las organizaciones sociales de la ciudad. El obispo y el diácono de la iglesia anglicana también hicieron un llamado a escuchar los clamores del pueblo trabajador. Mercedes comentó sobre la experiencia de trabajo organizado que llevan a cabo en el Refugio Libertad junto a las niñeces, adolescencias, jóvenes y adultxs. “Cada uno de estos espacios y organizaciones en el territorio son lugares para albergar la esperanza”, detalló Rodríguez.
Por su parte, Adriana Ochoa hizo memoria de las luchas del pueblo y la importancia de mantener esas banderas en el escenario actual, e invitó a las rondas de memoria los segundos y últimos jueves de cada mes en la plaza San Martín, impulsadas por los organismos de DD. HH. de la provincia. «Reiniciamos las rondas de los jueves en la plaza y nos plegamos también a los reclamos por la falta de trabajo, por el hambre y porque nos están quitando la dignidad», explicó Ochoa.
Estuvieron presentes compañerxs de La Poderosa; Movimiento Evita; Federico Cortelletti, secretario general de Judiciales; la secretaria general de UPCN; Leticia Medina, secretaria adjunta de ADIUC y secretaria general de CTA; Leandro Vallejos, secretario general de UOLRA; referentes del Movimiento Campesino, de la Organización de Inmigrantes Andinos de Córdoba, del Encuentro de Organizaciones, entre otros espacios.
“Celebramos la amplia convocatoria que tuvo el encuentro y el deseo de continuar caminando juntxs para fortalecer la democracia, priorizar el diálogo por sobre la construcción de enemigos y la estigmatización de las organizaciones sociales. En momentos de crisis social y económica, apostamos al encuentro de todxs las y los actores sociales comprometidos con la justicia social, así como de sectores de diversas iglesias que reconocen y valoran el trabajo de todos los espacios organizados en favor de nuestros derechos”, manifestaron desde el colectivo.
*Por Redacción La tinta / Imagen de portada: Común Unión.
