Ganó Putin, amenaza de Tercera Guerra Mundial, crisis en Haití y ¿Kate Midleton dónde está?
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- ¿Qué pasa en Haití?
A estas alturas, hace tiempo que es posible afirmar, sin temor a equivocarse, que Haití es un Estado fallido. Es decir, un Estado que se ve imposibilitado de asegurar el suministro de los servicios básicos y el funcionamiento de las instituciones más elementales a su población. Según datos de la ONU, 4,3 millones de personas ya padecen hambre grave y 1,4 millones se encuentran al borde de la hambruna. El país, además, no ha celebrado elecciones nacionales desde 2016.
Hace dos semanas, durante un viaje internacional del ―ahora ya ex― primer ministro Ariel Henry, diversas organizaciones criminales aprovecharon la situación para unificar fuerzas y presionar por la salida del premier. Este movimiento parece estar motivado por el anuncio de un nuevo aplazamiento de las elecciones. El 2 de marzo, estas bandas llevaron a cabo ataques coordinados en dos de las principales cárceles del país, liberando a los presos, y también sitiaron el puerto de la capital y rodearon el aeropuerto nacional con el objetivo claro de evitar el regreso de Henry. El primer ministro se vio atrapado en Puerto Rico luego de que República Dominicana rechazara un plan para su retorno a Haití en un vuelo nocturno en helicóptero desde su territorio. Ante esta situación, varias embajadas europeas trasladaron a sus diplomáticos y los marines estadounidenses evacuaron la embajada de su país en Puerto Príncipe.
Hoy, Haití es, básicamente, un territorio disputado por distintas bandas armadas que intentan hacerse con el control de lo que queda del país. El 11 de marzo, durante una reunión internacional en Jamaica convocada por los países del Caribe anglófono (CARICOM), en la que participó el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, el primer ministro Ariel Henry accedió a renunciar. En este encuentro, el grupo internacional acordó un plan para que líderes haitianos establezcan un gobierno de transición que conduzca hacia elecciones democráticas, aunque este escenario presenta incertidumbres en la actualidad. El viernes pasado, Blinken anunció que casi todos los representantes de coaliciones políticas y grupos de la sociedad civil han sido designados para formar parte del Consejo Presidencial de Transición. Este consejo tiene como objetivo seleccionar a un primer ministro interino y formar un gabinete ministerial, además de colaborar en la organización de elecciones generales.
Los miembros del Consejo representarían una variedad de sectores, incluyendo el sector privado, el Colectivo 30 de Enero (una coalición de partidos políticos), Fanmi Lavalas (el partido del expresidente Jean-Bertrand Aristide), el Acuerdo Montana (un grupo de organizaciones políticas y de la sociedad civil), el Acuerdo 21 de Diciembre (aliados de Henry) y Engagés pour le Développement (el partido del expremier Claude Joseph). Además, se incluirían dos miembros observadores sin derecho a voto: uno en representación de la sociedad civil y otro del sector religioso, según detalla el experto en la actualidad haitiana, Jake Johnston, en CEPR. El grupo político Pitit Dessalines, dirigido por el exsenador Jean-Charles Moïse, ha declinado el formar parte en el Consejo de transición y está buscando establecer otro órgano que cuente con la participación de Guy Phillipe, líder rebelde que ha estado involucrado en varios intentos de golpe de Estado contra el gobierno de Aristide. Phillipe fue recientemente deportado de Estados Unidos, donde enfrentó cargos por lavado de dinero.
Jimmy «Barbecue» Chérizier ―o «Babekyou», como se lo conoce en su país― es un exoficial de policía haitiano que se ha convertido en un líder criminal y está comandando la unificación de varias bandas. En la actualidad, lidera el grupo armado Fòs Revolisyonè G9 an Fanmi e Alye, una coalición conformada por los nueve grupos armados más influyentes de Haití, con sede en Puerto Príncipe. Su discurso político, por momentos, adquiere un tono revolucionario y de redistribución del ingreso.
- Seis años más para Putin
Vladimir Putin alcanzó un 87% de los votos en las elecciones del fin de semana, superando su récord anterior del 76,7%. Estos comicios se llevaron a cabo en un contexto donde el Kremlin ejerce un control estricto sobre el sistema político, los medios de comunicación y el proceso electoral en general. Como resultado, no hubo ningún candidato de oposición creíble que compitiera contra el presidente ruso. El viejo Partido Comunista ruso se posicionó segundo, con un magro 4%.
Es innegable la legitimidad popular de la que goza Putin en Rusia, sin importar lo que se diga en Occidente. La participación popular fue la más alta desde 1991. Hay varios motivos que lo explican; entre los más importantes, se encuentra la guerra en Ucrania y el repunte de la economía, el auge del ultranacionalismo entre el pueblo ruso en un contexto donde se percibe atacado desde afuera. Además de un Putin que asegura cierto orden y estabilidad puertas adentro, muy lejos de los traumas del caos económico, político y social de los años noventa.
Los períodos presidenciales en Rusia son de seis años, por lo que la victoria del domingo lo proyecta, por lo menos, hasta 2030. Tras las enmiendas a la Constitución de 2020, podrá optar por una nueva reelección que, en caso de concretarse, lo podría mantener al frente del Kremlin hasta 2036. En su discurso de victoria, instó a los candidatos opositores a apoyarlo en la guerra contra Ucrania hasta conseguir la «victoria total».
- ¿Tercera Guerra Mundial en ciernes?
Previo a las elecciones, es importante resaltar que Ucrania intensificó sus ataques contra Rusia, llevando a cabo bombardeos en regiones fronterizas e, incluso, intentando infiltrar representantes a través de las fronteras rusas. Tras consagrarse nuevamente presidente, Putin alertó sobre la posibilidad de una Tercera Guerra Mundial. En caso de que la situación en Ucrania se profundice y se involucren soldados de la OTAN, como viene pidiendo Emmanuel Macron, el conflicto estaría a la vuelta de la esquina: «En el mundo actual, todo es posible. Todos comprenden que eso nos colocará a un paso de una Tercera Guerra Mundial a gran escala. No creo que a nadie le interese esto».
Donald Trump aseguró estos días que habrá un «baño de sangre» si no es electo en noviembre y podría, paradójicamente, contribuir a la paz en el mundo, ya que, según ha dicho, retirará gran parte de su apoyo financiero a la OTAN y dejará de apoyar a Ucrania en el conflicto con Rusia. Actualmente, pareciera que los dirigentes europeístas se encuentran mucho más preocupados por lo que sucedería con ellos y su financiamiento en caso de que Trump vuelva a la Casa Blanca que por la continuidad en el poder del ruso.
- Hacia las elecciones en Venezuela
El 28 de julio habrá elecciones en Venezuela, con Nicolás Maduro como candidato del oficialismo, buscando su segunda reelección. La principal candidata de la oposición, María Corina Machado, se encuentra inhabilitada para ser candidata y tienen tiempo hasta el 25 de este mes para rearmar la fuerza opositora, fecha en que vence la postulación de candidaturas.
Ayer, Henry Alviárez y Dignora Hernández, colaboradores de la candidata, fueron detenidos por las fuerzas de seguridad, sumándose a los opositores arrestados previamente: Luis Camacaro, Juan Freites y Guillermo López. Ya el 8 de marzo, había sido encarcelado Emill Brandt Ulloa, coordinador en Barinas, y esta misma semana, Joe Villamizar.
De acuerdo con el fiscal general Tarek William Saab, las detenciones se produjeron «en relación de todo lo que ha confesado Emill Brandt Ulloa» sobre supuestos planes de desestabilización contra el gobierno de Maduro. Machado, por su parte, denuncia una «persecución brutal» contra ella y contra su equipo, y una violación «gravísima» de los acuerdos de Barbados previo a las elecciones de este año.
El anuncio de la detención de Alviárez y Hernández ocurre en la víspera de que se abra el periodo de postulaciones de los candidatos rumbo a las elecciones presidenciales venezolanas.
Bonus track
1. El ejército israelí tomó el control de Al Shifa, el hospital más grande de Gaza, mientras continúa el avance de las tropas en Gaza y no hay, por lo pronto, ningún horizonte de paz.
2. Duro Informe de Amnistía Internacional: «En los primeros 100 días del presidente Javier Milei, la confrontación se convirtió en la narrativa gubernamental para desviar la atención sobre conflictos reales». Destacan tres ejes principales: el incremento de la violencia digital, la pérdida del poder adquisitivo de jubiladxs y represión como gestión del conflicto social.
3. Siguen los rumores sobre la salud y paradero de Kate Midleton, a pesar de la aparición el sábado en un supuesto video donde se la ve caminando. La última vez que la princesa de Gales participó en un deber público fue durante la temporada navideña y, desde la cirugía abdominal en enero, anunciada por los canales oficiales de la corona, ha estado incapacitada para llevar a cabo compromisos oficiales. El motivo detrás de su operación sigue siendo desconocido y, a pesar de haber estado hospitalizada durante dos semanas, continúa en proceso de recuperación, al menos hasta la Semana Santa. El periódico The Times ha especulado sobre una posible fecha para su regreso a la vida pública. Según el diario británico, el 17 de abril, día en que sus hijxs vuelven a la escuela tras las vacaciones, podría ser la ocasión en la que la princesa aborde el misterio en torno a su salud. Los rumores crecen y las especulaciones son variopintas. ¿Ustedes qué creen?
*Por Gonzalo Fiore Viani para La tinta / Imagen de portada: AFP.
