“Las Marchas del Retorno han revelado el rostro horrendo de la ocupación israelí”
El pueblo palestino sostiene una lucha sin cuartel contra la ocupación israelí en la Franja de Gaza desde hace varios meses.
Por Carlos Aznárez para Resumen Latinoamericano
Jamil Mizjer es uno de los importantes líderes revolucionarios de la Palestina ocupada y como tal viene luchando contra el invasor desde hace años en muy difíciles condiciones. Actualmente, Mizjer se desempeña como jefe de la rama del Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP) en la Franja de Gaza. En una entrevista con Resumen Latinoamericano, Jamil Mizjer hace un homenaje a todas y todos los luchadores palestinos que desde hace un año vienen protagonizando en Gaza las denominadas Marchas del Retorno. Además, expresa su opinión sobre la necesidad de seguir uniendo en la acción a las diferentes fuerzas de la Resistencia.
—En marzo, el pueblo palestino y sus organizaciones de resistencia recordarán no solo el Día de la Tierra sino también el primer aniversario de la emblemática Marcha del Retorno, donde mujeres y hombres de todas las edades han estado denunciando viernes tras viernes a la ocupación y exigiendo la liberación de sus tierras. La marcha pacífica fue contestada siempre con balas sionistas, muertos y cientos de heridos. ¿Podría hacer una reflexión y balance sobre el significado de esta marcha para el pueblo palestino y cuáles son los resultados obtenidos de cara al avance de la resistencia?
—Estas Marchas del Retorno han sido durante más de 50 semanas la base de unidad y consenso, tanto nacional como popular. En ellas participan todos los espectros políticos y sociales de los jóvenes, las mujeres, los niños y los ancianos, e incluye a todas las fuerzas nacionales, islámicas y las instituciones de la sociedad civil, así como los jefes y dignatarios de aldeas, agrupaciones y de grandes familias, todos unidos. Todos están de acuerdo de que las Marchas del Retorno forman una etapa importante de lucha en el largo camino de nuestro pueblo para conquistar sus derechos, y que ellas forman parte integral de la resistencia popular palestina contra la ocupación, los planes de liquidación sionistas y contra todas las formas del bloqueo. Estas marchas han logrado tener un estilo de lucha con voluntad colectiva popular, sigue su camino por más de 50 semanas, y a pesar de los enormes sacrificios y el asesinato sionista, existe y se mantiene un consenso para continuarlas enviando mensajes no sólo a la ocupación, sino a la comunidad internacional y la nación árabe de que hay un pueblo que resiste y decidido a conquistar sus derechos aferrándose por los principios y por la dignidad.
En cuanto a su pregunta sobre los logros de las Marchas del Retorno y sus consecuencias y efectos sobre la resistencia, podemos referirnos a un grupo de resultados y logros importantes: retomar la consideración del accionar unificado y popular en una unidad de todos los destacamentos y componentes nacionales bajo solo la bandera palestina y contra el sectarismo, demostrando vitalidades y potencialidades de nuestro pueblo. Posicionó a la causa palestina en la prioridad de la agenda de las instituciones internacionales y en las de los derechos humanos, ampliando las actividades de solidaridad internacional con nuestra causa y nuestro pueblo.
La amplia participación del pueblo en esta resistencia constituye la integración de las formas de lucha entre esta resistencia popular y la resistencia armada, abriendo la puerta hacia la formación del Centro de Operaciones Conjuntas, el cual fue un resultado importante de las Marchas de Retorno. En este centro se unen los fusiles palestinos de los Destacamentos de la Resistencia Armada bajo una sola bandera y en un solo centro que decide y determina la naturaleza de la respuesta unificada al enemigo. Las Marchas del Retorno llamaron la atención de la comunidad internacional hacia la realidad de los crímenes sionistas contra nuestro pueblo, y sobre la trágica situación en la Franja de Gaza debido al bloqueo y la continua agresión sionista.
En cuanto a las repercusiones y efectos de las Marchas del Retorno sobre la ocupación sionista, han logrado confundir completamente los cálculos de la ocupación y han revelado su rostro horrendo al mundo durante sus ataques a civiles desarmados. También alcanzaron a desmoralizar a los soldados de la ocupación, así como causar desgaste en las zonas palestinas ocupadas por las colonias sionistas cerca de la Franja de Gaza.
A medida que se acerca el primer aniversario de las Marchas del Retorno, la Organización Nacional para las Marchas del Retorno está llevando a cabo extensas discusiones y debates para evaluar la experiencia, abordar muchos de los aspectos negativos que han surgido durante esta importante etapa de lucha, para juntos crear nuevas formas y medios de lucha popular, y realizar esfuerzos para minimizar por completo nuestras pérdidas. Además, lo más importante es transferir y trasladar la experiencia de las Marchas del Retorno a todos los territorios palestinos, especialmente a Cisjordania, y convertirla en un levantamiento popular, en una Intifada generalizada bajo un liderazgo nacional unificado donde la Organización Nacional para las Marchas del Retorno sea su piedra angular.
—¿Cuál es el cuadro de situación que su organización hace sobre lo que está ocurriendo tanto en Gaza y Cisjordania, de cara al incremento de la ofensiva imperialista sionista-yanqui desde que asumiera el cargo Donald Trump? ¿Cómo está respondiendo la resistencia a esa ofensiva?
—En este momento, la causa palestina está pasando por la etapa más peligrosa, debido a la continuada agresión estadounidense para liquidar nuestra lucha mediante el “acuerdo del siglo”. Esto se da a la luz de la agresión sionista general contra nuestro pueblo y sus derechos, debido a la rendición de algunos regímenes árabes para la normalización de relaciones con la entidad sionista, y en presencia de una división palestina que condujo a una profunda crisis en el régimen político palestino, multiplicando y exacerbando el sufrimiento del pueblo palestino.
Por lo tanto, a la luz de esta realidad cruel e injusta, las opciones de nuestro pueblo parecen difíciles para enfrentar estos desafíos, pero este pueblo ha acumulado una experiencia extendida de más de 70 años. Es el mismo pueblo que confrontó y confronta constantemente con estos desafíos presentes a pesar de algunos obstáculos o reveses en diferentes lugares. Sin embargo, este pueblo siempre ha sorprendido y sorprende a todos por su Intifada y férrea resistencia, derrotando todas las conspiraciones y maniobras que amenazan nuestra causa. Francamente, en presencia de la división política y geográfica entre Cisjordania y Gaza y sus consecuencias catastróficas para nuestro pueblo, no hemos visto más que desafíos y grandes peligros que hoy los estamos enfrentando. Esto requiere sobre todo la restauración, concretar y lograr la unidad, como un paso de introducción para desarrollar una estrategia de lucha de resistencia capaz de utilizar y guiar las potencialidades de nuestro pueblo y crear todas las formas de lucha de resistencia, lideradas por la resistencia armada y la resistencia popular, y no negociar a cambiar ninguna forma de lucha por otra.
Por lo tanto, podemos colocar la piedra angular para el camino de respuesta de la resistencia contra cualquier escalada, ya sea por la ocupación o para hacer fracasar a los planes de liquidación del enemigo, y especialmente el “acuerdo del siglo” de Estados Unidos.
—¿Cómo se está trabajando, según el punto de vista de su organización, en consolidar la unidad de los distintos destacamentos de la resistencia?
—La recuperación de la unidad palestina requiere en primer lugar realizar en concreto la reconciliación que se construye sobre las bases y de acuerdo con los principios de participación y la asociación nacional. O sea, la construcción de la institucionalidad nacional universal que incluye a todos y ponerse de acuerdo para tener un programa nacional de resistencia que reemplaza el devastador y catastrófico programa de Oslo.
Según nuestra visión en el Frente Popular, para lograr la unidad nacional y enfrentar a todos los peligros nosotros enfatizamos que no necesitamos nuevas iniciativas, ideas o diálogos sobre la reconciliación y la realización de la unidad. Ya tenemos tantas resoluciones nacionales, de las que surgieron en los diálogos de El Cairo en los años 2005 o 2011, o de las que se emitieron desde el comité preparatorio en Beirut en 2017, que deben implementarse con la posibilidad de allanar el camino para el restablecimiento de la unidad y la recuperación.
El fracaso de las recientes rondas de diálogo y las medidas de castigo de Abu Mazen (primer ministro palestino) y su intención de formar un gobierno de algunos destacamentos, han profundizado la crisis y han hecho que nuestro pueblo y sus instituciones nacionales sean rehenes de intereses partidistas y sectoriales. En el Frente Popular hemos confirmado nuestro rechazo a participar en un gobierno de destacamentos porque ello profundizará la división. Así como también hemos rechazado cualquier contramedida de Hamas que exacerbe la situación de la población.
La posición del Frente Popular consiste en que la alternativa al gobierno fraccional es la formación de un gobierno de unidad según el acuerdo de El Cairo de 2011. Todos coinciden con dicho acuerdo y con que este asuma las funciones de la Autoridad Nacional en Gaza, Cisjordania y Jerusalén como una sola unidad geográfica y política, cuya tarea se limita a prepararse para las elecciones legislativas y presidenciales dentro de un período que no supere a los seis meses. También se hace necesario tomar una serie de medidas de emergencia para ayudar a nuestra población en la Franja de Gaza, y aliviar los problemas que sufren en forma cotidiana. Garantizar las libertades políticas, colectivas e individuales, que ayudan y facilitan realizar elecciones transparentes en todos los sindicatos, instituciones, universidades y municipios. Y con esto establecer un proceso de reconstitución del nuevo régimen político que abra paso a un nuevo Consejo Nacional Unificado, con elecciones basadas en el principio de la representación proporcional plena, cuya tarea central es unir a nuestro pueblo en la patria y en la diáspora y adoptar un programa político unificado que garantice el pluralismo político e ideológico, que proteja y defienda los derechos civiles y democráticos, y vincule a todos a la Ley fundamental y la Carta Magna de la Organización por la Liberación de Palestina (OLP).
Por otra parte, hay que eliminar los obstáculos frente a cualquier forma de lucha, según lo que se determine en cada concentración en las regiones, de manera que no esté en conflicto con la Carta Constitucional de la OLP.
Que se establezcan las bases para la recuperación de las dimensiones del panarabismo y el internacionalismo de la causa palestina; fortalecer las diversas formas de apoyo y solidaridad con nuestro pueblo, reconstruir las instituciones de la OLP que garantizan la participación y la asociación nacional que llevará bajo su responsabilidad, las circunstancias de la lucha y dirigir los asuntos de la patria lejos de las cuotas entre partidos. También llamamos y pedimos el cese de todas las formas de persecución de seguridad o políticas. Debemos reconsiderar el papel funcional de la Autoridad Palestina (ANP) como una herramienta para la lucha nacional palestina. Esta es nuestra visión para lograr la reconciliación y la restauración de la unidad, es una unidad de nuestro pueblo frente a la ocupación y las conspiraciones y maniobras que persiguen liquidar de la causa de nuestro pueblo.
—A fines de 2018 se produjo un salto cualitativo en el accionar de la resistencia armada. Después de una criminal incursión sionista que le costó la vida a varios luchadores palestinos, la respuesta sorprendió al alto mando militar israelí, sobre todo con la acción ocurrida en Ashkelon (el disparo de numerosos cohetes que no pudieron ser interceptados). ¿Significa esta respuesta el inicio de una contraofensiva unificada de la resistencia armada contra la entidad sionista? ¿Cómo es recibido por el pueblo palestino este tipo de acciones?
—Este logro aún no está completo y es un proceso acumulativo consolidado por el estado de consenso nacional y la unidad en el terreno y campos de batallas, el cual es como un recipiente que abarca la resistencia armada. En mi opinión, hay muchos pasos que debemos dar para acumular más sobre este importante paso logrado, y en especial el Centro de Operaciones Conjuntas¹.
En el Frente Popular fuimos de los primeros defensores, llamando a formar este centro como paso introductorio para luego convertirlo en un Frente de Resistencia Unificado, en el cual podríamos acordar la determinación de tácticas de resistencia sobre dónde, cuándo y cómo ejercer la resistencia.
El éxito de esta experiencia desde Gaza debe ser un paso en el camino para transferirla a todo el territorio ocupado, para que pueda provocar grandes pérdidas entre los soldados de la ocupación, y lograr un agotamiento y desgaste continuo a las fuerzas ocupantes, lo que elevará el costo de la ocupación y la convierte en una ocupación perdedora. Esta es una experiencia naciente que debe y necesita acumulaciones, y de un consenso nacional para convertirla en un Frente de Resistencia Nacional que tenga un fuerte abrigo popular que le permite cumplir sus responsabilidades al máximo.
¹Puesto de Mando de las Brigadas de la Resistencia Palestina integrada por partidos políticos y prganizaciones que desarrollan la lucha armada.
*Por Carlos Aznárez para Resumen Latinoamericano