Los jugadores de Bolsonaro
Lejos de mantenerse al margen de las elecciones presidenciales, muchos jugadores del fútbol brasileño se manifestaron abiertamente en apoyo a Jair Bolsonaro, el candidato ultraderechista que logró ganar la primera ronda este domingo. Ronaldinho, Rivaldo y Felipe Melo fueron los futbolistas más destacados que lo hicieron. «Me revuelco cuando veo jugadores y ex jugadores de derecha. Nosotros venimos de abajo, somos pueblo. ¿Cómo vamos a ponernos del otro lado?», criticó Juninho Pernambucano, el ex volante de la selección.
Por Redacción La tinta
«Me revuelco cuando veo jugadores y ex jugadores de derecha. Nosotros venimos de abajo, somos pueblo. ¿Cómo vamos a ponernos del otro lado? ¿Vas a apoyar al fascista Bolsonaro, hermano mío?». Las palabras de Juninho Pernambucano al diario El País de España retumbaron en el mundo del fútbol brasileño mientras otras grandes figuras de la selección se pronunciaban a favor del candidato que finalmente ganaría la primera vuelta de las presidenciales de Brasil.
El ex-volante del Vasco da Gama se refirió al complejo panorama político de su país a pocas horas de comenzar los comicios que le adjudicaron la victoria al candidato del Partido Social Liberal. Como pocas veces, jugadores retirados o en actividad manifestaron sus posiciones políticas en la recta final previa a las elecciones y no fueron pocas las adhesiones que recibió el diputado ultraderechista de parte de grandes referentes como Ronaldinho, Cafú, Edmundo, Rivaldo y Felipe Melo.
»Por un Brasil mejor, deseo paz, seguridad y alguien que nos devuelva la alegría. Yo escogí vivir en Brasil y quiero un mejor Brasil para todos», publicó «Dinho» en sus redes sociales. En la foto se ve al astro de espalda, con un fútbol en su brazo izquierdo y el 17 -número de la lista de Bolsonaro- bajo su inconfundible cabellera. El posteo superó los 45 mil retuits en un día.
El deseo de paz y seguridad de Ronaldinho está en sintonía con las promesas de Bolsonaro de mano dura y mayor presencia militar en las calles: «Muchos brasileños ignoran que muchos otros fueron torturados y asesinados en la dictadura. Es desesperante ver a gente apoyando una intervención militar. El Ejército existe para defender el país, proteger las fronteras, no para matar a brasileño en la favela. Ellos no fueron entrenados para eso. Dicen que defiendo la delincuencia. Pero la gente tiene que parar con esa historia de creer que todo crimen es igual. Una cosa es asesinar, otra es robar. No puedo poner a un joven de 18 años que ha robado en una cárcel. Cuando el chico sale, él quiere vengarse de la sociedad», señaló Juninho.
Entre los pronunciamiento más explícito y ruidoso que se dio en la campaña se destacó el de Felipe Melo, el 16 de septiembre pasado, ante las cámaras de televisión y luego de que Palmeiras empatara ante Bahía 1 a 1. Aun pisando el césped y con la casaca del Verdao, el referente del plantel le dedicó su gol al candidato del PSL: «Quiero agradecer a Dios por el gol, a la familia. Este gol va para nuestro futuro presidente, Bolsonaro».
Las palabras de Melo se viralizaron rápidamente y fueron reproducidas numerosas veces en los medios de comunicación. Ante las repercusiones que generó, tanto de rechazo como de apoyo, el club debió emitir un comunicado para desprenderse de los dichos de su jugador y resaltar su posición «neutral» ante el escenario electoral: «La posición política del atleta Felipe Melo refleja, única y exclusivamente, una manifestación particular y no de la institución. El Palmeiras respeta cualquier posición política de sus atletas, empleados y colaboradores, y ratifica su neutralidad en asuntos políticos, partidarios, religiosos o cualquier otra forma de manifestación personal”.
El año pasado Melo ya se había referido abiertamente en favor de Bolsonaro -reconocido hincha de Palmeiras- pidiéndole que acabara con los «vagabundos» (delincuentes). También lo hicieron Roger y Jadson, jugadores del Corinthians, Lucas Moura, delantero del Tottenham, y el histórico campeón del mundo Rivaldo: “El capitán volvió. Qué alegría saber que Brasil está despertando y viendo que J
air Bolsonaro es el candidato ideal para nuestro país. (…) Brasil encima de todo y Dios encima de todos”, dijo en sus redes sociales el ex número 10 de la selección campeona del Mundo en 2002.
«Hay mucha polarización. La sociedad brasileña está muy dividida y algunos jugadores sintieron la necesidad de manifestarse, la mayor parte con la ignorancia política que los caracteriza. Pero, de todas formas, es una manifestación válida dentro del régimen democrático», dijo a AFP Juca Kfouri, periodista y uno de los grandes cronistas de la Democracia Corinthiana, el movimiento de lucha contra la última dictadura brasileña que supo liderar Sócrates. A principio de los 80 y junto a un joven Lula, los jugadores de aquel plantel participaron de las movilizaciones en reclamo de elecciones directas y la restitución del sistema democrático. En las primeras horas del domingo, las redes sociales del Timao publicaron una imagen icónica de aquellos jugadores y un breve mensaje: «Luchamos por el derecho del voto y hoy tenemos otra oportunidad de ejercerlo ¡Votar con conciencia! #DemocraciaCorinthiana».
«Lula es un señor de 72 años que está siendo masacrado», opinó Juninho Pernambucano en su entrevista con el diario español, mientras se preguntaba «¿Por qué la gente odia a Lula? Lo que odian en él es la apariencia, el origen, el acento, la historia y la popularidad. La elite ejerce un gran dominio mental».
Superando el 45% de los votos, Bolsonaro llega a la segunda vuelta con un partido claramente a su favor. ¿Cuánto habrán influenciado estos cracks del deporte más popular de Brasil en ese resultado? Cualquier lectura puede ser tan compleja como el panorama social y político tras las elecciones. Para Juninho «el fútbol está tan perdido como Brasil. La diferencia es que el fútbol todavía tiene el talento a su favor y puede tardar menos para salir del agujero».
*Por Redacción La tinta