«Aguad nos prometió que se resolvería en 10 días; llevamos 3 meses y estamos peor»
El gobierno nacional ha prometido soluciones que no cumplió, mientras los familiares exigen hasta el día de hoy que se ponga lo que haya que poner para el rescate, con un hilo de esperanza para saber que pasó con sus seres queridos.
Por Juan Alberto Pérez para ANCAP
El 15 de noviembre pasará a la historia argentina como una de las fechas más tristes. Así como recordamos las fechas de los atentados a la Embajada de Israel y la AMIA; así como rememoramos el sitio donde estábamos cuando sucedió la tragedia de Cromañón; así como nos consternamos con la tragedia de Once; así como cada Junio sabemos que es la fecha para recordar a Darío y Maxi, el 15 de noviembre de 2017 es el día que desapareció el submarino ARA San Juan con 44 tripulantes y no se supo más nada. A poco de cumplirse ocho meses la búsqueda está en foja cero.
Ni el presidente de la nación, Mauricio Macri, ni el ministro de Defensa, Oscar Aguad, son claros a la hora de precisar por qué el submarino realizaba tareas de custodias de las aguas argentinas cuando no estaban las condiciones dadas para que zarpara. Ni el presidente, ni el ministro, ni la cúpula de la marina, dan respuestas de por qué desde el primer día no se salió a buscar los equipos necesarios para hallar el paradero del ARA con los 44 tripulantes. Por ello, los familiares que han pasado angustiosos días en Mar del Plata, esperando a sus hijos, esposos y esposas, padres, tíos y sobrinos que cumplían con un deber soberano para la patria, siguen a la espera mirando al horizonte del Mar Argentino con la remota ilusión de verlos otro día más.
Pero no se quedan quietos, y han dejado Mar del Plata para buscar respuestas en la Ciudad de Buenos Aires. Han plantado un acampe en la Plaza de Mayo, y piden que los reciba el presidente y les dé la solución necesaria.
María Victoria Morales es la madre del Cabo Principal, Luis Esteban García. Dejo su Tucumán natal cuando se enteró de la desaparición del submarino que tripulaba su hijo. Primero estuvo en Mar de Plata y hoy esta en Buenos Aires. Está implorando por la búsqueda, ya que hace tres meses se inició la contratación de equipos especiales vía contratación directa, que se cayó porque la comisión que iba a buscar la mejor propuesta, y la mejor tecnología, se equivocó. La que contrató no reúne las condiciones para la búsqueda y por lo tanto la misma está estancada. “Desde antes que esto pasara, nosotros los familiares, iniciamos nuestra búsqueda porque sabíamos que esta empresa era la peor, entonces empezamos contra viento y marea. Nosotros queremos que venga alguien ahora con la tecnología adecuada. Hasta el momento no tenemos nada. Hoy (viernes 29 de junio) tuvimos otra reunión con el señor ministro que no nos dejó conforme, una vez más, porque cada vez son promesas incumplidas” afirma María Victoria. “Están abandonados. Yo a mi hijo lo entregué creyendo que era bien cuidado. No lo supieron cuidar. No son bien cuidados los que están ahora porque salen embarcaciones casi sin personal y tenemos miedos que vuelva a ocurrir algo. No queremos que haya mas familias sufriendo” exclama María Morales, madre del cabo García.
—La contratación que hicieron ¿a cargo de quién estuvo?
—Una comisión que supuestamente está conformada por un equipo que sabe evaluar. Técnicos que no supieron elegir la empresa adecuada. Entonces al no tener los papeles en regla, o cambiarle el nombre de dueño entre la pre-adjudicación y la adjudicación, hizo que esto cayera en la nada. Es el empeño del gobierno en no decirnos a nosotros en donde están, lo que queda de nuestros familiares. Hasta hace poco lo esperaba a mi hijo. Un poco la ilusión la tengo, un poco lo espero pero es la ilusión para poder sobrevivir, convencerme que puede volver. Cuesta ver a mi nieto que vea una foto de su padre y diga “papá agua, papá mar” y no tener una respuesta para decirle. Yo quiero que me traigan a mi hijo y ponerlo en un lugar donde el día de mañana sus hijos sepan dónde está su papá.
—¿El ministro que les dice? ¿Hay un equipo que pueda resolver donde está el submarino?
—La propuesta que tenía para hacernos hoy (viernes 29/6) era que volvió a salir una licitación a foja cero de nuevo. Él nos había prometido el 16 de abril que se iba a resolver en 10 días, llevamos ya 3 meses y estamos en peores condiciones de aquel entonces. Ahora quiere hacer una pre licitación, quería que vengan empresas a presentarse de nuevo, cuando creo que, nosotros, los familiares estamos más capacitados que la comisión que él tiene.
Viviendo en una villa de emergencia cursando sólo hasta cuarto grado saque 3 hijos maravillosos para que sirvan a la patria y respeten los valores, sin embargo ahora no me los cuidan. Con todo esto que pasó aprendí un montón de cosas y creo que estamos en condiciones de darle clases a ellos, de lo que necesitamos para que aparezcan, porque ellos no tienen un hijo bajo el agua, nosotros si lo tenemos.
Si pudiésemos vaciar el mar lo haríamos, pero no está en nuestras posibilidades. Por eso la impotencia, nuestro dolor, nuestra angustia, esta decisión de venir acá porque estando en Mar Del Plata, haciendo convocatorias pequeñas nadie nos daba bolilla, como dicen en el interior “Dios está en todas partes, pero atiende en Buenos Aires”. Entonces vinimos acá para que seamos visibles, ellos no tienen voz, nosotros sí. Dijeron que el submarino estaba en perfecto estado cuando sabemos que no es así. Le quieren echar la culpa al comandante y a la tripulación por haber tomado decisiones erróneas, cuando sabemos que no es así. Ellos no pueden defenderse pero nosotros sí estamos para defenderlos a ellos y vamos a seguir así.
—Al presidente, Mauricio Macri, de aquella vez en Mar Del Plata ¿No lo vieron nunca más?
—El presidente nos recibió acá después de 87 días, 40 minutos a 40 familias, una sola persona por familia. No tuvimos la oportunidad de decirle todo y en ese momento dijo que se iba a hacer lo posible y lo imposible, y que había presupuesto ilimitado para la búsqueda del submarino. Hoy en día están evaluando cual es el costo más bajo. La vida de nuestros hijos no tiene precio. A mí el dinero que puedan gastar no me va a devolver la vida de mi hijo. Yo lucho porque es mi hijo, simplemente por eso. No nos convence lo que nos dijo. Después estuvo frente a la base jugando al golf y cruzaron dos chicas jóvenes para ver si las podía recibir. Él se tomó su helicóptero y se fue, nunca las recibió. Nos hizo burla, porque podía jugar golf en otro lado pero fue a jugar justo frente a nosotros dónde estamos ahí todos los días desde el 17 de noviembre.
—¿Hay una causa judicial abierta por la investigación?
—Si, hay una causa judicial. Por el momento lo judicial y buscar culpables no nos interesa demasiado. Nosotros queremos llegar a esa instancia de que nos traigan a nuestros hijos y saber que pasó. Después los culpables. Sólo queremos eso, tanto nosotros como familiares y tanto el pueblo argentino, saber ¿Qué pasó con el ARA San Juan? Estamos juntando firmas para que se sepa que aún estamos acá y que hay 44 personas debajo del agua.
—¿Cómo se están sosteniendo ustedes que vienen desde tan lejos, en tu caso de Tucumán, acá en Buenos Aires?
—Nosotros ahora agradecidísimos de todas las personas que vienen, sean agrupaciones o particulares. Nos traen, comida, facturas, gaseosas, agua mineral y un abrazo que nos llega al alma y un apretón de manos que nos hace seguir. Eso nos reconforta. Nos llegan víveres y frazadas porque no podemos sacar una frazada de un hotel. Vino gente que nos trajo abrigos y frazadas. Nosotros los norteños no estamos acostumbrados a este frío. Hay gente muy buena en Argentina. Agradecidos de eso, por eso estamos sosteniendo tanto por lo que comemos y por el amor que nos brindan. Y ustedes también que nos hacen una nota, los atendemos con el cariño que brindamos, para que sepan que los 44 compatriotas están debajo del agua abandonados.
*Por Juan Alberto Pérez para ANCAP