La babirusa atómica, y las patas cortas de las mentiras
Este libro álbum para niños, niñas, adolescentes y grandes nos posibilita una lectura sobre el rol de los medios, y la oportunidad de debatir en torno a la manipulación de la información, mientras disfrutamos de una lectura tan cálida como crítica.
Por Soledad Sgarella para La tinta
Un libro álbum es un libro en el que tanto el texto escrito como las imágenes, son igual de importantes para la producción de sentidos. Es decir, palabras e ilustraciones construyen conjuntamente los mensajes, se potencian y se necesitan. Por eso, quienes realizan las ilustraciones comparten la autoría con quienes escriben, como en el caso de Joaquín Areta y Magui Ledesma, creadores de La Babirusa Atómica, un libro en el que la literatura y las artes visuales se cruzan y tensionan problemáticas actuales de nuestra sociedad a través del lenguaje artístico.
De qué se trata semejante mentira
Las babirusas son un tipo de chancho, pelado y colmilludo, que viven (en la realidad) allá por las selvas de Indonesia.
En La Babirusa Atómica, el Señor Mock inventa la presencia de babirusas, y las acusa de ser las causas de todos los problemas de su país. Así, por medio de una mentira que crece y crece, logra instalar una psicosis colectiva en toda la sociedad, alimentada infinitamente por los medios de comunicación, protagonistas y co-creadores de la mentira a la que el pueblo teme irracionalmente y que avala cualquier represalia sin posibilidad de reflexión, incluso llegando a respaldar una guerra contra Birmafastán.
Pero no vamos a spoilear más.
Un cuento político
Trabajando en equipo con la editorial Adriana Hidalgo, los autores logran un libro álbum crítico pero ameno, con humor ácido pero accesible, protagonizado por personajes caricaturescos ilustrados con lápiz negro sobre acrílico, collage y color digital.
Jugando con el formato que reconocemos propio de diarios y periódicos, en La Babirusa Atómica se cuenta -de manera simple y concreta- cómo aquellos que tienen el poder manipulan la información y, en base a supuestos, a un merengue de temas y a ninguna prueba, construyen temor y violencia.
Se cuenta cómo lo que los medios hacen no es solamente inventar babirusas que no existen, sino que -principalmente- manipulan nuestras emociones y sentires, y es justamente esa parte la que deberíamos poner en la mesa (y en las bibliotecas) para repensar con los y las pequeñas, futuro y presente de nuestras comunidades.
►La Babirusa Atómica, en la librería infanto juvenil En un lugar de la Mancha (Fructuoso Rivera 260, local 2).
*Por Soledad Sgarella para La tinta.
