Paula Maffia: «La reunión en torno al fogón es exclusivo matrimonio de la mujer»
Las Taradas toman el escenario de Club Paraguay con un cóctel exótico de múltiples texturas musicales. También estarán Las Despechadas y una invitada deluxe: la trombonista Negra Marta Rodriguez. La Tinta conversó con la cantante Paula Maffia sobre música, feminismo y la presentación de esta noche.
A través de la recuperación y reversión de canciones de los años 40 y 50 provenientes de todas partes del mundo, esta orquestina de muchachas supo inaugurar un lugar poco explorado en la música argentina. Recientemente Las Taradas lanzaron su segundo disco Sirenas de la jungla, una expedición sonora en once tracks que va hamacándote entre bossa nova, bolero, cumbia, cuarteto, blues, swing, folklore… esencias que estas seis mujeres desdoblan y conjugan, creando un híbrido sabroso. “El disco fue muy bien recibido y nos delimitó más claramente: afianzó nuestro territorio. Es un poco menos naif, menos simpático, más oscuro que el anterior [Son y se hacen]. Me gusta que diéramos ese paso. Sirenas de la jungla es duro de roer, más osado y rico musicalmente. También es muy emocionante cantar canciones propias y que la gente se apasione con ellas”, sostiene Paula Maffia.
La cantante adelantó que muy pronto estrenarán el videoclip de La Preferida, canción de su autoría, y que tendrá una estética acorde al estilo de Sirenas…: “va a ser un contrapunto interesante de lo que fue Que no, que no, que fue más lúdico. Este será más elegante y oscuro… como de ensueño”.
Curiosidad y sed de experimentación fue lo que las acercó a la madre del cuarteto cordobés: Leonor Marzano, de quien reversionan En bancarrota. “A La Leo la trajo Lu Martínez a la banda. Es nutritivo volver a las raíces, los géneros en sus comienzos me parece que pueden satisfacer muchos tipos de hambre. Con el cuarteto original pasa como con la cumbia de la montaña o de la costa colombiana que es tan pura, una cosa maravillosa.”
Entre sus canciones favoritas con Las Taradas, Paula evoca el blues sensual Some of yours y la versión de Pájaro que deja el nido, que abre el último disco. “Esa canción me sume en un trance increíble, quedó muy buena y es un viaje interesante el que propone.” También rescata El Jangadero, una bella incursión en el folklore litoraleño: “para nosotras tiene una carga emocional muy fuerte porque nos arrima muy cerca a una amiga muy querida [Carla Branchini, clarinetista de Las Taradas en sus inicios]. Me parece que esa canción definitivamente nos toca un lugar muy especial a todas, nos emociona mucho”.
Verlas en vivo es una verdadera experiencia metasensorial. Las Taradas combinan su música con una divertida puesta en escena y la caracterización de personajes como Luisa Malatesta, alterego de Paula Maffia. “Los alteregos surgieron como un chiste interno de pensar qué hubiéramos sido nosotras en los años 40 o 50, trasladar nuestra cotidianidad, nuestra coyuntura a otra realidad. Al estar atravesadas por este alterego de alguna manera se genera un embudo de las cosas que diríamos y haríamos, para que la gente no vea a un grupo de solistas sino una faceta de cada una y una exaltación de esa faceta con una noción de conjunto.”
El sexteto pisa fuerte y sabe crear un clima de celebración, diversidad, feminismo y libertad. Conversamos acerca de la música como campo de disputa de sentidos, y de los posicionamientos y luchas colectivas que se dejan traslucir sobre el escenario.
“Para mí subirme a un escenario es prolongar mi militancia diaria de ser mujer y de no morir en el intento -manoseada, abusada, vejada, opinada-. Ser mujer es una militancia permanente en una sociedad donde somos personajes que se construyen en contraposición con una figura ideal que es la de mujer perfecta, una ficción quimérica. La mujer nunca va a poder satisfacer todos los binomios trágicos que tiene que tener una mujer perfecta: hipersexual y gran madre, santa y puta a la vez, ama de casa y gran profesional, joven pero madura. Además la mujer esta regulada por un personaje que también tiene que asumir roles: el hombre fuerte, abastecedor, heróico, futbolero, masculino, muy bien dotado, peleador pero intelectual… entonces estamos moldeadas por una ficción de ser humano que regula otra ficción de ser humano . Todos estamos careteándola, digamos. Pero en este baile a las mujeres nos atraviesa la violencia en todo tipo de aspecto.
Hay muchas particularidades en la música y hasta en los comentarios ‘bondadosos’ o ‘amigos’. Por ejemplo la típica pregunta que nos han hecho varones y mujeres de la prensa ‘¿por qué son todas mujeres en Las Taradas?’ Y yo digo… caramba! ¿esta pregunta se la hacen a La Beriso, a La Bersuit? ¿Tengo que justificar ser mujer y juntarme con mujeres? ¿Estamos en el 1500 en un aquelarre de brujas y tenemos que explicar que está todo bien y que no vamos a quemar un gato negro y hacer cultos satánicos? Otra pregunta típica es ‘¿qué es esto de las mujeres en la música ahora?’ Y yo pienso en la historia del ocultamiento de la mujer en la música. De hecho no hay nada que me parezca más femenino y antiguo que el canto, el culto a lo oral y a lo colectivo; la reunión en torno al fogón es exclusivo patrimonio o matrimonio de la mujer. Es el origen de las civilizaciones. Nos quitaron eso, hicieron una elipsis de un millón de años y de pronto nadie recuerda a las mujeres en la música. La historia del ocultamiento de las mujeres en la música es la historia del ocultamiento de las mujeres, punto.”
¿Cómo recomendarías vivir la experiencia sonora de Las Taradas a alguien que las escucha por primera vez?
“Un disco de Las Taradas tiene una potencia, es tan contundente y versátil que le diría que lo escuche como quiera, donde quiera porque confío en el poder de nuestra música, va a entrar directo a la pituitaria de estas personas. Idealmente no escucharlo en la computadora porque nos tomamos la hermosa licencia de grabar en lugares increíbles con una acústica extraordinaria y trabajar con los mejores técnicos. Realmente le damos mucha vuelta de tuerca al sonido (miaaaau). Después la gente pone el disco en el celular y se escucha todo mal… pero si lo pones en un estéreo o en el auto no lo podes creer, es un viaje. Hace poco presentamos el disco en Sonido 360, en el teatro ciego. Las personas que sí podemos ver vamos al lugar y estamos en una caja negra, absolutamente a oscuras. Hay estímulos olfativos y escuchás el sonido surround… la gente que fue me comentó que es una cosa espeluznante (miaaau). Esto que escuchás de fondo es mi gato senil que, bueno, pega estos gritos…”
► Las Taradas se presentan hoy a la medianoche en Club Paraguay junto a Las Despechadas. Musicaliza Un oso pasadisco(s).
