Campaña Plurinacional NO al RIGI: «Participación y más participación para que sepan que no tienen licencia social para estos acuerdos»
Después de las declaraciones del gobernador confirmando la adhesión de Córdoba al Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI), hablamos con el especialista Guillermo Folguera y con las organizaciones que están al frente de la campaña que busca informar y frenar la aceptación en las provincias y los municipios de un régimen que profundizará el extractivismo y acelerará la crisis ambiental.
La semana pasada, fue noticia que el gobernador de Córdoba, Martín Llaryora, confirmó al Grupo de Entidades Empresarias de Córdoba (G6) y a las del sector agropecuario que nuestra provincia se adherirá al Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI), el esquema de flexibilización impositiva, aduanera y cambiaria que incentiva a compañías a invertir en la Argentina.
La Campaña Plurinacional NO al RIGI tiene como objetivo inmediato brindar información, dar a conocer los alcances, consecuencias y frenar la adhesión en las provincias y los municipios donde aún no lo han tratado. Desde todo el país, asambleas socioambientales y barriales, comunidades indígenas, organizaciones sociales y políticas, activistas, autoconvocades, multisectoriales, organismos de derechos humanos, medios de comunicación independientes y referentes de la cultura y del arte conforman esta plataforma urgente.
«El RIGI es inconstitucional porque no respeta los artículos 75 inciso 17 de la Constitución Nacional, viola tratados internacionales, como el Acuerdo de Escazú, al no brindar información pública del impacto y los daños ambientales producidos en cada localidad. Dado el rápido tratamiento, durante las últimas semanas, a la adhesión a este Régimen en cada provincia y municipio del país, nos hemos movilizado para la realización de acciones concretas que lo rechacen. En un contexto de crisis social, climática y ecológica sin precedentes, el RIGI agudiza el escenario, ya que profundiza el extractivismo. La política de Estado, con su negacionismo en materia de crisis climática como también del genocidio, ha implementado una nueva ingeniería represiva que, sumado al extractivismo, reprime, expulsa a las comunidades de sus territorios y continúa con su plan ecocida de despojo y ajuste”, dicen desde la Campaña.
Como recuerdan, la Ley de Bases ―aprobada en medio de escandalosos casos de corrupción, sobornos y una brutal represión― tiene que respetar la autonomía de las provincias, por lo que cada una de ellas, así como los municipios que las integran, deben adherir al RIGI para poder ser implementado. “Si bien, hasta el momento, las provincias de Río Negro, Jujuy y Mendoza ya suscribieron al RIGI, se ha presentado en Chaco, Catamarca, Tierra del Fuego, Chubut, Neuquén, San Juan, Córdoba, Santa Fe, Misiones, Salta, CABA y Santa Cruz para adherir, y, en Entre Ríos, el gobernador presentó el RINI ―régimen especial, colonial, para la provincia―, se están organizando acciones en todo el territorio para defender los bienes comunes. Es evidente que, durante todo agosto, los distintos gobiernos acelerarán el proceso para que el RIGI sea votado y entre en vigencia”, afirman.
Desde la campaña, aseguran que no es casual que el actual jefe de Estado haya señalado al movimiento ambiental como un actor terrorista: «Es con la clara intención de colocarnos ahora como el nuevo enemigo interno de la sociedad. Nos tildó de ‘pocos y ruidosos’, y a eso respondemos con más organización. A lo largo de los años, hemos logrado derechos importantes en materia ambiental para el bien común de la sociedad y, con este régimen, logros como la Ley General del Ambiente, leyes de prohibición de la megaminería, la ley de bosques, la ley de glaciares, la ley del manejo del fuego y otras se ven amenazados”.
Pero, como afirma Guillermo Folguera en diálogo con La tinta, este intento no va a estar exento de resistencias territoriales. «Los grupos de poder intentan acelerar un ya degradado territorio argentino y, en este sentido, aumentar las situaciones y los escenarios de desigualdad social y destrucción ambiental. Cuesta no hacer una lectura directa respecto al RIGI. no solo en cuanto a intento por profundizar los extractivismos, sino también frenar lo que fueron tres grandes levantamientos provinciales que dejaron su huella en los últimos cinco años como Mendoza, Chubut y Jujuy, en donde en gran parte, y con articulación con otros sectores ―como en el caso de Jujuy con los docentes―, el tema del agua quedó en un lugar central», expone el biólogo y filósofo, investigador de CONICET y profesor de la UBA.
¿Cómo seguir de nuestro lado? “Creo que es la pregunta fundamental… Cómo lograremos dar articulaciones entre los sectores, cómo lograremos que estos temas se hagan temas de agenda para las comunidades y haya una comprensión muy clara de este desastre que estamos viviendo, de esta destrucción ambiental absolutamente inédita que tiene nuestro país. Tenemos el desafío de la articulación y cambiar resistencias meramente locales por resistencias regionales, como se dio en escalas provinciales y nacionales. Otro desafío fundamental tiene que ver con articular sectores de resistencias, que se dieron históricamente fragmentadas. Cuando hablamos del agua, evidentemente, estamos hablando tanto del movimiento ambiental como de los pueblos originarios, como el movimiento de género, como el movimiento de laburantes, como el movimiento de estudiantes, como el movimiento de derechos humanos. Comprender que estamos hablando de problemáticas comunes y, en este sentido, las estrategias también tendrán que ser comunes”.
Para Folguera, los poderes tienen muy claro qué hacer respecto a los pasos y el RIGI es un resumen de eso. «La Campaña contra el RIGI es un primer intento de eso, pero, evidentemente, tendremos que aceitar y vincular nuevas formas, nuevos desafíos y nuevas generaciones de invenciones. Necesitamos inventarnos y reinventarnos para no solo poner freno a esta situación que estamos viviendo tan dramática y tan clara, sino, y sobre todo, conectar con necesidades y deseos de nuestras comunidades”, finalizó el especialista.
Por su parte, desde la plataforma plurinacional, tras años de resistencia, tienen claro “que es un derecho democrático ocupar todos los espacios públicos, desde hacer la entrega formal de una carta a cada uno de los legisladores, concejales y autoridades de todo el país a participar en las legislaturas, movilizar en la calle. Participación y más participación para que sepan que no tienen licencia social para estos acuerdos, y poder generar la mayor presión colectiva para que no tomen decisiones a espalda del pueblo, en función de sus negociados con las corporaciones”.
En este sentido, con la campaña, buscan fortalecer la red plurinacional del movimiento socioambiental, articulándose, conectándose más y organizando diversas acciones a lo largo y ancho del país. “Sabemos que, en la construcción colectiva, vamos abonando la resistencia necesaria también para cuidarnos y poder salir a defender el agua, las economías regionales, los ecosistemas y la vida de todos los territorios en conjunto. Porque acá nadie se rinde ni resigna ante una ley o un proyecto, o un régimen, como ya lo vivimos en la historia de resistencia con el Chubutazo, el Mendozazo, el Atlanticazo y el Jujeñazo, Andalgalá, Jáchal y tantos otros ejemplos más de resistencia. Porque este nuevo plan de neocolonización y saqueo no es posible sin una nueva ingeniería represiva. Ahora, nos toca organizarnos más y luchar contra el RIGI”, concluyeron.
*Por Soledad Sgarella para La tinta / Imagen de portada: Campaña Plurinacional NO al RIGI.
