
Cruzar barreras, a nado
Germán Arévalo tiene 16 años, vivió toda su vida en un barrio humilde de Córdoba y con una parálisis cerebral que afecta el movimiento de sus miembros inferiores. La natación, que comenzó para él como una herramienta de rehabilitación, lo llevó a recorrer el país, luego a San Pablo, próximamente, a Lima y, más tarde, ¿quién sabe? Germán se permite soñar. Por Facundo Iglesia.