La polémica de la copa del mundo
Argentina venció a Francia en una trepidante final de copa del mundo que quizá sea la mejor de toda la historia. Los sudamericanos festejaron en la cancha de Lusail con el trofeo más cotizado del mundo, pero hubo una persona que no debió haber estado ahí.
El famoso chef conocido como “Salt Bae” estuvo en la premiación y se le vio incomodando a los jugadores argentinos, pero lo que es peor, se le vio tomándose fotos con el trofeo. El protocolo de FIFA dicta que solo los ganadores y jefes de estado pueden tocar la copa. ¿Qué pasó ahí?
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Repasemos que pasó ese día en el estadio y porque el chef estaría metido en un grave problema con el máximo organismo del futbol.
¿Quién es Salt Bae?
Su nombre es Nusret Gokçe nació en Turquía el 9 de agosto de 1983. Viene de una familia humilde y empezó siendo carnicero. Su determinación lo llevó hasta abrir su propio restaurante que después se convirtió en una cadena.
Fue un video viral donde le pone sal de una manera bastante peculiar a la carne, el que lo hizo famoso. Ya para ese entonces, sus restaurantes eran todo un éxito en Dubai y varios países europeos. Eran lujosos y ofrecían platillos exóticos. Su carisma hizo que se volviera toda una celebridad y que sus restaurantes fueran inundados por deportista, artistas y hasta mandatarios. Todo mundo quería una foto con el peculiar chef que tiene una forma de ser muy particular.
Uno de sus clientes más frecuentes y puede decirse que amigo es el presidente de la FIFA, Gianni Infantino. Se le ha visto en muchas ocasiones en su restaurante en Dubai, y el chef es invitado constantemente a eventos de la FIFA, donde es toda una atracción.
Para la copa del mundo en Qatar, le fue dada una acreditación, cosa que ya fue muy criticada, porque esa documentación está reservada para periodistas o exfutbolistas. Mucha gente decía que él no tenía nada que hacer ahí, pero al final no faltó a ningún juego y se le veía siempre a lado de Infantino o en zonas donde no debería de estar.
¿Qué dice el protocolo del trofeo?
La FIFA tiene dos trofeos. El original que está resguardado en el museo del organismo y que está muy protegido, y el otro que guarda el campeón del mundo un par de años, y que después se les da una réplica que guardan en su federación.
El trofeo original solo sale para la inauguración y la final del torneo. Cuando un equipo lo gana, tienen la oportunidad de tocar esa copa que solo han podido levantar unos cuantos. Cuando salen del estadio se les entrega la réplica original que se llevan a su país.
En el protocolo está escrito que la copa solo la pueden tocar las personas que la han ganado y jefes de estado. Nadie más está permitido para poder tocar el trofeo. Según las reglas, la persona que toque la copa, sin ser ganador o diplomático, será vetado de cualquier evento de la FIFA.
Hay un antecedente de esto y no tiene mucho tiempo. En la gira del trofeo para el mundial de Sudáfrica, el cantante David Bisbal, encargado de la versión de español de una de las canciones del mundial, besó el trofeo en una presentación. Esto activó el protocolo y la copa fue retirada rompiéndole el corazón a miles de personas que esperaban sacarse una foto con la tan cotizada copa. El cantante fue vetado de cualquier evento FIFA, por romper una de las reglas sagradas del organismo.
La FIFA tomó esta medida después de la primera restauración del trofeo, que estaba ya muy dañado. Fue creado para la copa del mundo de Alemania 1974, y en ese momento, aunque era importante, lamentablemente fue muy manoseada.
Fue en 2006 cuando la FIFA decidió hacer una serie de reglas y darle la réplica al campeón que antes se quedaba con la copa por dos años antes de regresarla a la FIFA. La razón fue que cuando Italia festejaba en su regreso Roma para presentar la copa a la afición, se les cayó el trofeo, y un pedazo de la malaquita que adorna la base de la copa se desprendió.
La Federación Italiana pagó la restauración y después se les hizo una réplica. En la restauración se percataron que la copa ya estaba bastante dañada, y si ven fotos del trofeo antes, estaba opaco, y hasta se veía sucio.
Se decidió darle una pulida y cambiarle el tornillo que lleva por la parte interior que se estaba oxidando. En ese momento la FIFA prohibió tajantemente que cualquier persona pusiera las manos en la copa.
La persona encargada de sacarla del maletín personalizado, que tiene un par de guantes, y es alguien que está autorizado por el máximo organismo y lleva bastantes años trabajando solo como administrador oficial de la copa del mundo.
¿Qué pasará con Salt Bae?
Se hizo oficial que la FIFA está lanzando una investigación profunda para saber que pasó ese día en el estadio. Se sabe que el chef estaba autorizado para estar en las zonas VIP del estadio, pero no tenía acceso a la cancha y menos en la ceremonia de premiación.
Cuando se entrega el trofeo, solo pueden estar jugadores y cuerpo técnico. Se les da acceso a familiares previamente autorizados por una lista. En un momento se le da acceso al presidente de la FIFA y mandatarios para entregar las medallas y demás premios.
Esto quiere decir que la presencia de Salt Bae no estaba autorizada por nadie. Al ser una persona muy importante en Doha, porque ahí vive y tiene una de sus sucursales más concurridas, aprovechó y se infiltró sin problema hasta los festejos de los jugadores argentinos.
Muchos jugadores se les notaba incómodos, porque el turco les arrebataba el trofeo y los forzaba a tomarse fotos con él. Estaba por todos lados del campo, junto con su camarógrafo personal que tampoco no tenía nada que hacer en el campo de juego.
Eso ya es una ofensa bastante seria, pero el levantar el trofeo, como si lo hubiera ganado, es motivo de veto. Infantino es posible que solo le dé una leve advertencia, pero eso le baja un poco de misticismo al trofeo, que ahora todo mundo sabe que puede tocar.
Dentro del organismo, se está diciendo que quieren un castigo ejemplar, para que sirva como una advertencia para quien quiera tocar la copa próximamente. Salt Bae quizá haya vivido un momento único, pero probablemente le salga demasiado caro ¿Qué pasará con él?