Precarización laboral: vulnerabilidad de trabajadores migrantes ante aplicaciones de delivery
Un informe de la Red LATAM, realizado por periodistas de Latinoamérica, advierte que el trabajo de repartidor es, muchas veces, la única opción laboral que se abre ante los migrantes. Además, los cadetes denunciaron que los gastos de indumentaria y movilidad corren por su cuenta.
Por Conclusión
Periodistas latinoamericanos, agrupados en la Red LATAM de Jóvenes Periodistas de Distintas Latitudes, realizaron “Repartos LATAM”, un informe que expone la precarización laboral que padecen los repartidores de plataformas digitales, como Rappi, Pedidos Ya y Glovo.
El informe se centra en las condiciones laborales de los trabajadores extranjeros y cita un estudio de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) que determina que, en Argentina y Chile, más del 70% de los trabajadores de entrega basada en aplicaciones son migrantes.
En este sentido, se destacó que ser repartidores y migrantes representa una “doble vulnerabilidad”, pero aclara que para muchas personas que debieron mudarse de país esta es la mejor o la única oportunidad laboral.
El informe de la OIT, además, explica que la mayoría de los migrantes latinoamericanos optan por ser repartidores, ya que, debido a su grado de educación, hay pocos o nulos empleos disponibles, y también porque el servicio de delivery tiene bajas barreras de entrada y facilidad de acceso.
Por otro lado, establece que los migrantes muchas veces son discriminados y esto impide que puedan acceder a otros empleos, a pesar de estar formados para ellos.
“A nosotros nos toca comprar la chaqueta y las gorras, algo que es publicidad para la empresa”, denunció una repartidora en el informe de la Red LATAM, dando cuenta de la explotación que reciben por parte de las compañías de reparto.
En sintonía, otro trabajador comentó que las empresas “se quedan con las propinas” que reciben los repartidores.
“En Rappi me hacen trabajar por muy poquita plata y, como soy migrante, es la única forma de tener un trabajo estable”, manifestó otro cadete, que reside en Colombia y que también dio cuenta que el servicio de reparto “mueve la mayor parte de los comercios a nivel económico”.
Asimismo, cada vez que los repartidores aceptan realizar un envío, lo hacen bajo los términos y condiciones que imponen las plataformas, y denunciaron que el pago no es proporcional a la cantidad de kilómetros que recorren para concretar el servicio.
En Argentina, cada repartidor recibe un dólar por pedido, mientras que el sueldo mínimo por mes ronda los USD$298,03 (cerca de $29.800). Se estima que, mensualmente, cada trabajador realiza cerca de 298 envíos, concretando entre 10 y 13 entregas diarias.
En tanto, el informe de los periodistas latinoamericanos advirtió que las empresas de reparto ofrecen “precarias condiciones de trabajo” a sus empleados.
“Millonarias compañías de reparto operan en un marco laboral y tributario difuso. Se estima que los trabajadores de reparto asumen el gasto de combustible, la reparación de sus vehículos y el equipo celular y de internet con que la empresa realiza su geolocalización”, detalló el estudio.
Al respecto, el diputado de Costa Rica, José María Villalta, observó: “Las empresas de reparto precarizan totalmente el empleo de sus trabajadores, que están desprotegidos, sin seguridad social, sin seguro por accidentes laborales y con salarios de hambre, pero sometidos a todas las reglas de la plataforma. Incluso los sancionan si cometen una falta. La plataforma no asume ninguna responsabilidad sobre ellos y para un patrón es el mejor de los mundos posibles. Por eso, muchos países legislaron para proteger a estos trabajadores”.
El informe, además, denunció que los repartidores deben “comprar la mochila e indumentaria con el logo de la aplicación y cumplir determinados horarios para asumir más entregas”, al tiempo que destacó: “Trabajan todo el tiempo que puedan, pese a la baja retribución”.
Además, y citando a la crónica “Capitalismo con tracción a sangre”, escrita por Emiliano Gullo para Revista Anfibia, informaron que las aplicaciones funcionan bajo una lógica en la que a menos cantidad de pedidos aceptados por parte de los cadetes, menor solicitudes de envío le aparecerán al trabajador, disminuyendo así sus repartos y sus ingresos.
Finalmente, el informe destaca el trabajo de los repartidores latinoamericanos durante la pandemia, quienes continuaron trabajando a pesar de estar “desprovistos de seguridad social y de salarios básicos”.
El informe Repartos LATAM fue realizado por 50 periodistas de 16 países: Colombia, México, Venezuela, Brasil, Chile, Argentina, Cuba, Costa Rica, El Salvador, Puerto Rico, Perú, Ecuador, Uruguay, Paraguay, Guatemala y Bolivia. Para la investigación, se entrevistaron a más de 75 repartidores de 13 países.
*Por Conclusión / Imagen de portada: La tinta.
