Vacunas combinadas: una jarra loca que sí

Vacunas combinadas: una jarra loca que sí
12 agosto, 2021 por Soledad Sgarella

Entre tanta fake, mejor escuchemos a quienes saben y saben explicar lo que saben. En esta nota, hablamos con dos investigadores de CONICET: el Dr. Guillermo Docena, bioquímico e inmunólogo, y el Dr. Mario Lozano, virólogo molecular. Nos sacamos las dudas con los especialistas para ir tranquiles a nuestras segundas dosis, combinar vacunas y avanzar en un horizonte más amable en todo este lío.

Por Soledad Sgarella para La tinta

Hace un año y medio que estamos alertas, a la defensiva y con miedo. Estamos cansades y muches esperando la segunda dosis con ansiedad. Ante la demora de segundos componentes, la semana pasada, la ministra de Salud de la Nación, Carla Vizzotti, anunció que se completarían los esquemas con una de las siguientes combinaciones: Sputnik V (componente 1) y AstraZeneca; Sputnik V (componente 1) y Moderna, y AstraZeneca y Moderna. El lunes, Córdoba arrancó con la intercambiabilidad de diferentes vacunas empezando con los mayores de 60 años y personas de grupos de riesgos, con más de 90 días de recibida la primera aplicación de Sputnik V.

La decisión nacional está basada en datos preliminares de los análisis interinos de seguridad e inmunogenicidad del estudio que llevan adelante Buenos Aires, CABA, Córdoba, La Rioja y San Luis, cuyos resultados indican que la variedad de respuesta inmune es segura, confiable y hasta mejor que las vacunaciones homogéneas. 

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(Imagen: La tinta)

El estudio (descripto como: colaborativo, aleatorizado, abierto, multicéntrico y adaptativo de no inferioridad) para analizar esquemas heterólogos con las diferentes vacunas contra COVID-19 disponibles en el país -con el objetivo de evaluar su inmunogenicidad y seguridad- es coordinado por el Ministerio de Salud de la Nación en cooperación con el Fondo Ruso de Inversión Directa (RDIF), el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación, y el CONICET.

El Dr. Mario Lozano, virólogo molecular, explica con alma docente algo clave: los esquemas combinados de vacunas no son una novedad que apareció con la necesidad actual. Las combinaciones de vacunas, dice, son una forma bastante común a la que se recurre en vacunología para solucionar problemas de provisión. 


Lozano nos pone en una situación simple: si miramos nuestros carnets sanitarios (algo que seguramente antes de esta pandemia no habíamos hecho con atención), o el de nuestres hijes o hermanes menores, vamos a poder comprobar que, en algunos casos, se dieron las primeras dosis de la vacuna producida por una compañía y la segunda por otra diferente. 


“La combinación se está planteando aquí porque hay una necesidad producto de una escasez en la posibilidad de conseguir el componente 2 de la Sputnik, en nuestro caso, para terminar los protocolos de vacunación y eso lleva a que el Estado busque estrategias alternativas que le den versatilidad al programa de vacunación. Esa versatilidad, como en tantos otros casos en vacunología, se consigue usando otras vacunas que apunten al mismo blanco. En este caso, es el coronavirus y, en particular, la proteína espiga que es la que forma la capa externa del virus. Las vacunas que usamos, aún con diferente tecnología (con excepción de las vacunas a virus inactivados, como la Sinopharm o la Sinovac), están apuntadas al mismo componente del virus. La inmunidad se genera contra la proteína activa y, por lo tanto, una puede ser el refuerzo de la otra sin ningún problema”, explica el investigador de CONICET.

Lozano enfatiza en que la combinación funciona bien y además se sabe que se puede hacer porque ambas vacunas individualmente son eficientes, lo que quiere decir que nos protegen, son seguras y que no generan efectos secundarios graves. “Un detalle es que acá, además, estamos comprobando que eso funciona”, asegura Mario y recuerda que, en Europa, cuando ocurrió lo mismo, es decir, cuando tuvieron escasez de una vacuna, comprobaron que a las personas que habían vacunado por primera vez con AstraZeneca podían ofrecerle otra vacuna alternativa como segunda dosis y usaron Moderna o Pfizer, y que funcionaron también muy bien. “Tanto es así que la primera ministra Ángela Merkel se vacunó con un sistema combinado, para mostrar que el Estado alemán estaba de acuerdo con este esquema de combinar vacunas”.

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(Imagen: La tinta)

En diálogo con La tinta, el Dr. Guillermo Docena, bioquímico e inmunólogo del CONICET, describe un poco lo que están estudiando: “Las combinaciones son seguras y no se produjeron reacciones adversas inmediatas a la aplicación de la segunda dosis. Se sacó sangre del día cero, o sea, antes de la vacuna, y a los 14 días se midieron anticuerpos. En base a esos resultados preliminares de todos los grupos (es decir, las seis combinaciones más los tres grupos que se le dio el esquema homólogo)”.


“Lo que se vio es que los niveles de anticuerpos de combinación heteróloga, en comparación con el esquema homólogo, da igual o mayor, lo cual permite presuponer que esta combinación de vacunas está funcionando y, probablemente, al menos va a generar la misma eficacia o esperemos que la mejore. Durante un año, se va hacer seguimiento de los pacientes, se medirán anticuerpos y células -es decir, inmunidad humoral y celular-, y se va a evaluar el efecto de la combinación a largo plazo”, remarcó Docena.


El virus sigue acá a la vuelta y la circulación es muy alta. Delta y la tercera ola son inminentes. Pero sabemos (sí, lo sabemos) no será lo mismo si estamos vacunades. La nueva variante tiene una gran capacidad de transmisión y de circulación, así que díganles a madres, padres, abueles y adultes mayores a quienes les ofrezcan la combineta que sí, que agarren viaje, que la respuesta de inmunogenicidad de la combinación de vacunas resulta similar o mejor a los esquemas homólogos.

“En definitiva, lo riesgoso no es combinar vacunas. Hay que sacarle dramatización a eso porque lo hacemos, lo hemos hecho muchas veces, lo han hecho nuestres hijes, lo hemos hecho nosotres con nuestres hijes. Por sobre todas las cosas, lo peligroso no es vacunarse, lo dramático es enfermarse en esta pandemia. Las vacunas, como siempre decimos, salvan vidas”, concluye Lozano.

*Por Soledad Sgarella para La tinta / Imagen de portada: La tinta.

Palabras claves: argentina, CONICET, covid-19, Vacunación

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