Por Tehuel, Vicky, Fátima y todes les que nos faltan, gritamos fuerte: las vidas trans importan

Por Tehuel, Vicky, Fátima y todes les que nos faltan, gritamos fuerte: las vidas trans importan
11 agosto, 2021 por Redacción La tinta

A cinco meses de la desaparición de Tehuel de la Torre y a casi un mes de los transfemicidios de Fátima Belén y Vicky Núñez, la asamblea de Aparición con vida de Tehuel – Córdoba, autoconvocades y organizaciones afines llaman a concentrar a las 16:30 en el Patio Olmos para marchar por todes les asesinades, desaparecides y encerrades por el transodio y por este heterocistema, y en contra de la criminalización de la protesta.

Por Tres Tristes Trolxs* para La tinta

Me levanto a las 3 AM. Tehuel no aparece. Si camino por la calle, no me reconocen.
Nombran a quien ya no existe. Saludan a quien ya no soy.
Nos veo parados en estas calles, en cada sombra de cada árbol,
siendo el silencio de la noche de un pueblo. Siendo lo que no se ve.
Lo que desaparece y permanece invisible.
Somos lo que no se quiere ver. Pero me equivoqué.
No somos lo que desaparece. Somos a quienes desaparecen.
Tehuel no desapareció. A Tehuel lo desaparecieron.**

Es de noche y seguimos releyendo, repasando, escribiendo, buscando el cómo. Es que, aunque cueste y se nos desacomoden un poco las vísceras en el intento, nos mueve una urgencia profunda de convocar su atención y sensibilidad un poquito pa’ estos lados. Pasa que, para cuando lleguen a leer esto, el calendario gregoriano —ese que lleva el nombre de un papa católico, varón cis y europeo— marcará cinco meses sin Tehuel, el pibe trans de San Vicente desaparecido en democracia, cuando salió a laburar pa’ poder sustentar los días en plena pandemia.

¡Imaginen ustedes si tuviera algún calendario de uso mundial con su nombre o algo que se le parezca! ¿Existiría entonces esta necesidad ineludible de traerlo, a más no sea en letras desoladas? Pero no. Lo que en verdad sucede es que apeeenas asoma en la agenda mediática de los monopolios masivos de (des)información y, quizás más importante, en la agenda emocional de gran parte de la sociedad indiferente. Por eso, hoy y desde hace 5 meses, le buscamos y nombramos, preguntando cada vez más fuerte: ¿DÓNDE ESTÁ TEHUEL? Porque cada nuevo amanecer de incertidumbre y falta de respuestas sí que tiñe la agenda de una red afectiva de familiares y amigues del wacho que, en su angustiante espera, no tienen descanso.

Pero eso no es todo. En pocos días más, podremos contar un mes desde los asesinatos de Fátima Belén en Formosa y de Vicky Núñez en Paraná en manos de las policías locales. Azul, Luciana, Soraya, Cielo, Fabiola, Baucis, Alejandra y Santiago son también algunos de los nombres que integran las listas de desaparecides y asesinades por el transodio del hetero-paki-cistema.

Y adivinen qué: estamos HARTES. Se nos tajea el pecho de impotencia de medirnos el dolor en cuántos días de calendarios impuestos pasan, de seguir sumando nombres de compañeres que nos duelen por su ausencia, de no poder salir ni a reclamar por elles a la calle sin que la yuta asesina nos violente aún más. Ninguno de estos son casos aislados. Muy por el contrario, todas estas personas que hoy nos faltan evidencian que el problema es estructural y construye a nuestras identidades travestis-trans-no binaries como la otredad a ser erradicada.

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(Imagen: La tinta)

Furia y resistencia trava: sabemos lo que es sobrevivir o desaparecer***

Mientras escribo, lloro. Pienso en mis amigxs y me doy cuenta de que lo que nos convoca a reunirnos
es el enojo, la tristeza, la impotencia de escribir carteles, pegar fotos por la ciudad,
pintar una barredora, organizar una feria, organizar la visibilidad.
Gritar uno, dos, tres nombres que no se nombran en ningún medio.
Y pienso en la vorágine y manija de todo ese movimiento corporal, emocional, colectivo,
que en un momento baja. Nos desarmamos, lloramos, nos quebramos,
pensando entre amigxs y compañerxs que el nombre del cartel, la foto de la pegatina
podemos ser cualquiera de nosotrxs.
**

Nos preguntamos: ¿cuánto aguanta un cuerpo? ¿Y unx cuerpx trans dentro de un cis-tema heteronormado, patriarcal y opresor? ¿Qué vidas cuentan con el privilegio de vivir y dormir en paz mientras el cotidiano de las identidades LGBTTTIQANB+ es que nos violenten, desaparezcan y maten por ser quienes somos o por exigir nuestros derechos? (Ver: “¿Alguien se puso a pensar por qué Tehuel no podía salir al mundo?”)

Seguimos siendo nosotres quienes salimos a exigir que se cumplan las leyes escritas por burócratas que capitalizan nuestras luchas desde atrás de un escritorio, esas luchas que llevamos en la piel, en las calles, en la experiencia de nuestras corporalidades e identidades.


Es que esa militancia de la buena moral, la solidaridad y la corrección política no nos sirve si, aunque la ley esté escrita, la Policía no deja de hostigarnos y matarnos; si la ley está escrita y todavía no contamos con vivienda, salud, educación y comida; si la ley está escrita y Tehuel sigue desaparecido por pibe, por trans, por desempleado.


Seguimos siendo nosotres a quienes arrastra la Policía hasta un patrullero por visibilizar que a nuestras compañeras trans las mataron estas mismas fuerzas de (in)seguridad; quienes ponemos los ojos a la hora del gas pimienta que tira la Infantería; son nuestres compañeres trans a quienes se llevan detenides sin decirnos a dónde. Y a nosotres nos hierve la sangre por haberles visto desvanecerse asfixiades por la yuta y por no saber si les molieron la cara a golpes. Siguen siendo nuestros los cuerpos que empujan al piso y golpean las fuerzas represivas del Estado. El mismo Estado que legitima estos golpes, haciendo uso del monopolio de la fuerza, mientras habilita una X en un DNI “para personas no binarias” y que invisibilizó nuestro recorrido en estas mismas discusiones no haciéndonos partícipes de políticas que afectan nuestras vidas. Seguimos siendo nosotres quienes recibimos las violencias diarias, físicas y simbólicas, de todo este circo cis-hetero-paki.

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(Imagen: La tinta)

¿Dónde está Tehuel? El gobierno es responsable, la yuta y medios también***

El 26 de julio pasado, en el marco de una concentración por Vicky y Fátima que se realizaba simultáneamente en varias partes del país, la Asamblea de autoconvocades por Tehuel – Córdoba denunció haber recibido hostigamiento, provocación y violencia constante por parte de la Policía. En su comunicado de descargo (Parte I) por Instagram, cuentan que “mientras se desconcentraba, un grupo de efectivos de la Policía de Córdoba e Infantería, en un acto de provocación, comenzaron a reprimir mediante golpes, con la decisión de llevarse detenidxs a dos compañerxs y haciendo un uso desmedido de la fuerza. En simultáneo, Infantería tiraba gas pimienta directo a la cara y los ojos, golpeando, empujando y ahorcando, dejando a varies herides. Este hecho represivo viene en concordancia con el desmedido despliegue policial llevado a cabo en cada actividad que hemos desarrollado, en las cuales ya habíamos sido hostigades y provocades”.

Los medios locales salieron a hablar de “disturbios” y “pintadas”, incluso confundiendo y tergiversando por completo el contexto, y poniendo en primer plano la versión de la policía represora, pero callaron lo que para nosotres se hace evidente: que les detenides fueron violentades física, psicológica y simbólicamente de una manera constante. Que estuvieron totalmente incomunicades durante 16 horas y que une de elles tuvo que desvestirse delante de cinco efectivos policiales -todos varones cis-, faltando al protocolo nacional de detención de personas LGBTTTIQANB+. “Les acusaban de mentir con sus nombres, entraban en la madrugada de forma violenta con interrogatorios confusos, amenazaban con trasladarles al pabellón de hombres; hasta último momento, les hicieron creer que largaban a une y no a le otre”, sigue el comunicado (Parte II).

“Tanto los efectivos de la Policía como del servicio penitenciario (esta última depende de la secretaría de DD. HH.) de la UFAI y la UCA, no respetaron la Ley de Identidad de Género Nº 26.743 ni los protocolos de detención existentes para personas LGBTTTIQANB+». Pero, para ellos, la impunidad. Para nosotres, bueno, ya a esta altura, lo saben o lo pueden imaginar.


«De no ser por la insistencia de las personas detenidas, no se habrían respetado sus nombres ni sus identidades. Los pocos cuidados que tuvieron fueron evidentemente para resguardarse debido a la visibilidad de la situación. Les negaron el acceso a sus tratamientos hormonales, interrumpiendo los mismos y negando así su importancia dentro de la salud integral”, afirman en el descargo (Parte III).


Larga evidencia tenemos a favor al afirmar que este accionar de las instituciones de (in)seguridad forman parte de toda una estructura de organizacion cívico-política-cis-hetero-patriarcal que violenta nuestras corporalidades e identidades trans a diario. Estructura que encuentra su aval ideológico-cultural en las redes de sentido que tejen las instituciones mediáticas, encargadas de la producción y reproducción de la información y el sentido social hegemónico.

Desde que la desaparición de Tehuel se publicó como hecho noticioso, son muchísimas las violencias e irresponsabilidades a la hora de comunicar -y tergiversar- la información. Para el 9 de abril de 2021, Dolores Curia escribía en una nota para Página/12: “(…) C5N, un canal que cuenta con la presencia de una columnista trans, Alejandra Malem, no muestra el mismo interés por incorporar voces disidentes en otros programas, o por lo menos en respetar en términos generales la ley de Identidad de Género sancionada en 2012: tanto conductores de piso como movileros pasaron varios días tratando a Tehuel en femenino. En Crónica, con un cronómetro en pantalla -el mismo que se usa para esperar la primavera- que contaba las horas que el joven lleva fuera de su casa, una panelista le preguntó a la hermana, Verónica Alarcón, si el chico había tenido alguna vez ‘algún novio. Es decir, ¿se descarta totalmente una relación amorosa con Ramos? No te lo tomes a mal…’”.

El 12 de julio pasado, un informe documental televisivo de Mauro Szeta, que salió por Telefe, comenzaba afirmando que Tehuel fue captado, tentado con una oferta de trabajo y posiblemente asesinado. Una foto es su última imagen con los dos acusados. Sin saberlo, en esa foto, compartiendo un vino, iba camino a su propio homicidio”. Este tratamiento repudiable, primero: arriesga hipótesis aún no confirmadas, que hieren la sensibilidad de quienes exigen la aparición con vida de Tehuel y no se resignan a buscar un cuerpo en “una laguna, un basural, una casa” o una chanchería, los lugares hedientos que este video pone como principales escenarios de búsqueda. Segundo: culpabiliza a Tehuel de su desaparición y de su presunto homicidio. Pero recordemos: Tehuel no desapareció, a Tehuel lo desaparecieron.

Y la culpa no es nuestra por salirnos de lo establecido como «normal». La responsabilidad es de todes quienes siguen encarnando sin cuestionamiento la sistemática violencia transodiante que nos hacen padecer a diario con sus acciones y comentarios hostigadores, con sus indiferencias e intolerancias, y un largo etcétera que -desgraciadamente y con más frecuencia de la que podemos soportar- termina en nuestra invisibilización y exclusión de múltiples ámbitos, en Tehueles que no aparecen y en compañeres brutalmente asesinades por sanos hijos del patriarcado.

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(Imagen: La tinta)

Disculpen las molestias, gente, acá falta un pibe trans***

Entonces, si la ley está escrita y nos siguen violentando, desapareciendo y matando, no nos vamos a quedar quietes. En palabras de Autoconvocadxs por Tehuel – Córdoba: “Este 11 de agosto, nos volvemos a convocar, a hacer más ruido que antes, ¡porque hace 5 meses falta Tehuel, por Fátima Belén, por Vicky Núñez y por todes les asesinades, desaparecides y encerrades por el transodio y por este heterocistema de mi3rda! No a la criminalización de la protesta. La yuta no nos cuida”.

Nos encontramos este miércoles 11 de agosto, a las 16:30 en Patio Olmos, para reclamar justicia, para construir una venganza colectiva que funcione como trinchera, para seguir gritando que nuestras vidas trans importan.

 

Para aportar al “FONDO DE LUCHA POR LA APARICIÓN CON VIDA DE TEHUEL – CÓRDOBA”:
CVU (Mercado Pago) 0000003100083304505750 – Alias TEHUELCONVIDAMP

Aquí para ver flyer original de la actividad.

Por Tres Tristes Trolxs para La tinta / Imágenes: La tinta
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*Tres Tristes Trolxs es la inestable manera de nombrar la confluencia espontánea de múltiples seres transmutantes y sintientes que nos unimos en la necesidad y deseo de expresar por escrito nuestra rabia y nuestra ternura.
**Los fragmentos en cursiva fueron extraídos de “¿Dónde te buscamos?”, videopoema de Nawel Alex Mauereen (texto) y Mutar Nunca Termina (montaje).
***Los subtítulos pertenecen a la canción “¿Dónde está Tehuel?” de Avenvuelo.

Palabras claves: Tehuel De la Torre, trans

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