El 35% de la población del Gran Córdoba no tiene cobertura de salud
Equivale a más de 500 mil personas y el dato se desprende de un informe presentado esta semana por el Observatorio de Trabajo, Economía y Sociedad (OTES). La situación es aún más preocupante en los sectores populares; en el 10% de hogares con menores ingresos, la proporción se eleva a 8 de cada 10 personas.
Por OTES para La tinta
Falta de cobertura y precios que vuelan
Si al hecho de que, en el Gran Córdoba, una gran cantidad de personas no cuentan con cobertura de salud, le sumamos que, entre 2013 y 2019, los precios de los medicamentos y de los servicios de medicina prepaga aumentaron (660% y 700% respectivamente) por encima de los salarios del sector registrado (450%), vemos que el acceso a la salud por fuera del sistema público se vuelve cada vez más dificultoso para gran parte de la población.
En los sectores de menores ingresos, esta dependencia del sistema de salud pública se hace aún más notoria. No solo por el hecho de que el porcentaje de personas sin cobertura es aún mayor, sino porque presentan una mayor proporción de ingresos informales o no registrados que aumentan por debajo de los salarios formales.
Es decir, nos encontramos con que gran parte de la población de Gran Córdoba necesita de un sistema de salud público de calidad para poder ejercer su derecho al acceso a la salud. Y que esto se intensifica en aquellas personas que ya se encuentran en una situación de vulnerabilidad respecto a sus ingresos. En este contexto, ¿cuál fue la respuesta del gobierno provincial en los últimos años?
2015-2019: la salud de los/as cordobeses/as cada vez más privada
Entre 2015 y 2019, el presupuesto del Ministerio de Salud de la provincia, descontando los efectos de la inflación, cayó casi un 20%. Para el año 2020, se presupuestó una suma levemente superior a la de 2019, pero que no llega a recuperar la pérdida de los años anteriores. De hecho, el presupuesto del Ministerio de Salud provincial del año 2020 está en niveles similares a los de 2013, mientras que la población de la provincia creció un 11% en los últimos 10 años. Es interesante destacar que, en el período 2015-2019, la provincia inauguró 4 nuevos hospitales, pero esto no se tradujo en aumentos en el presupuesto destinado a la salud haciendo que el funcionamiento de los mismos sea realmente dificultoso.
Esta decisión del Gobierno Provincial de disminuir los recursos destinados a la salud pública ha llevado a que el sector privado gane participación en la prestación del servicio de salud. Los cargos públicos en el sector de salud cayeron 8% entre 2015 y 2019, mientras que el personal de salud en el sector privado aumentó 4% en el mismo período.
El crecimiento del sector privado por sobre el público se observa también en la cantidad de establecimientos, donde los centros privados de atención de salud en la provincia duplicaban a los públicos para el año 2019. La ausencia del Estado se hace aún más notoria en el caso de instituciones para el cuidado de adultos/as mayores donde la proporción es de 9 privados por cada público.
El derecho a la salud en Córdoba: vulnerado y cada vez más desigual
Para concluir, el recorte en la salud pública, y su reemplazo por la prestación privada, dificulta el acceso a la salud de más de 500 mil personas del Gran Córdoba y afecta, particularmente, a las personas de menores ingresos que, en su mayoría, no tienen cobertura de salud. A su vez, la ausencia del Estado es aún más marcada en establecimientos de cuidado, por lo que las personas que no pueden afrontar el costo de las instituciones privadas tienen que resolver estas tareas dentro del hogar, donde recaen mayoritariamente en las mujeres y sujetas feminizadas.
Para ver el informe completo, podés visitar la página web de OTES en https://otescba.com
