Esbozo de una crítica a las Epistemologías del Sur (Parte I)

Esbozo de una crítica a las Epistemologías del Sur (Parte I)
16 octubre, 2019 por Redacción La tinta

Con este texto inauguramos un análisis crítico que intentamos realizar desde Iberoamérica Social sobre los aportes y dificultades que presenta la propuesta de las Epistemologías del Sur, sobre todo cuando este esquema teórico-político es pensado desde América Latina y nuestras luchas populares. En esta primera parte hacemos una aproximación a sus núcleos conceptuales básicos. 

Por Oscar Soto para Iberoamérica Social

Modernidad en la producción de saberes

El ciclo político-económico del siglo XX, iniciado a partir de 1945, marca por un lado la reconfiguración geopolítica global que acompañó a la consolidación hegemónica de Estados Unidos, al tiempo que evidencia la re-centralización de los poderes occidentales, cuya deriva de larga data se dio en una accidentada ironía histórica: con el paso del tiempo, las antiguas Indias Orientales -devenidas en “Occidente”- han testimoniado la mutación del Tercer Mundo, por medio de la cual tanto el Norte como el Sur Global adquieren relieve en el análisis político de la geografía imperial actual. La estructuración de las dinámicas de poder mundial a partir del periodo de posguerra desata un conjunto de acciones político-económicas de carácter planetario que rearman, en el concierto internacional y en los Estados a escala nacional, el carácter de las disputas sociales y políticas venideras.

La paulatina irradiación de un fenómeno imperial occidental, cuyo centro político -Europa- se erigió en amalgama de clasificación/jerarquización de tiempos históricos, culturas y territorialidades, fue revestida de una forma universalizante de sometimiento, llevada a cabo por el sujeto histórico europeo a partir de nuevas modalidades de expansión del capital. El desenlace imperial que ordena el mapa global responde estrictamente a la consagración de una forma de ver y sentir el mundo propuesta con capacidad de convicción y asumida también por la fuerza.

Las consecuencias del orden antes descripto inciden en una amplia gama de aspectos sociales, políticos, económicos y culturales. Precisamente, la ruptura radical entre razón y cuerpo representa cabalmente una de las aristas centrales del avasallamiento de la modernidad sobre las esferas sociales de vida, particularmente en lo relativo al conocimiento y a la producción de saber. La distinción tajante entre sujeto y objeto de conocimiento encuentra en la lógica colonial/moderna sustento práctico, y a su vez -por esas mismas razones- una forma dualista de comprensión del mundo se consolida como elemento distintivo de la sociedad occidental. De ello participan las ciencias sociales, en el orden lógico de conocimiento construido en este drama moderno.

Ahora bien, ¿Es posible entonces definir el estado epistemológico actual de las ciencias sociales sin tener en cuenta el escenario geopolítico imperial? En primer lugar, no intentamos realizar aquí una definición general de la situación actual del debate epistémico mencionado; sin embargo, abonamos la idea de que es altamente improbable explicar las dinámicas epistemológicas y sus modalidades de pragamatización del conocimiento, así como los avatares de la producción de saberes y las exigencias epistémicas que rodean el conocimiento de las ciencias sociales, sin encuadrar el entrecruzamiento de nociones teóricas y políticas dentro de la compleja correlación de fuerzas sociopolíticas-económicas actuales. Las perspectivas teóricas y las formas de producir saberes están íntimamente vinculadas a la posición política y la región del globo que se habite geográfica o mentalmente, siendo la contraposición Norte/Sur Global una conceptualización plausible de retomar al respecto.

Dentro de las urgencias epistemológicas que el rigor de la coyuntura global le presenta al conocimiento, identificamos en el aporte teórico de Boaventura de Sousa Santos la crítica a la particularidad endógena que las ciencias del Norte ofrecen como aspecto hegemónico: un razonamiento/método unívoco de acceso a una verdad con pretensiones universalizantes, una distinción tajante entre sujeto y objeto (corporeidad y razón) y una elocuente diferenciación entre sociedad y naturaleza. En realidad, lo que Santos destaca –como veremos más adelante- no es otra cosa que lo que Lander denomina una construcción histórica de un tipo de sociedad moderna liberal autopercibida como totalidad, y más específicamente lo que el pensamiento y las luchas latinoamericanas vienen produciendo, silenciosamente, desde antaño.

Boaventura-Sousa-Santos

Epistemologías del Sur

La recuperación e implementación de nuevos procesos de producción de conocimiento por parte de clases y grupos sociales que han reaccionado a la dominación y opresión sistemática del orden colonial-moderno es, en Santos, el fundamento de la propuesta de las llamadas Epistemologías del Sur (ES). Estas Epistemologías son, en principio, la contrapartida necesaria al proceso de colonialismo y modernización del que antes hemos hecho mención: frente al fenómeno colonial arraigado desde la Conquista misma -particularmente pensando en Nuestra América- en formatos de injusticias sociales, raciales, sexuales, económicas y fundamentalmente cognitivas, resultan prioritarias un conjunto de epistemologías tejidas desde el Sur Global, en tanto conocimientos y saberes que no responden a los requerimientos normativos de la ciencia moderna como tal. El intelectual portugués resume el núcleo de su noción epistemológica como: 

El reclamo de nuevos procesos de producción, de valorización de conocimientos válidos, científicos y no científicos, y de nuevas relaciones entre diferentes tipos de conocimiento, a partir de las prácticas de las clases y grupos sociales que han sufrido, de manera sistemática, destrucción, opresión y discriminación causadas por el capitalismo, el colonialismo y todas las naturalizaciones de la desigualdad en las que se han desdoblado; el valor de cambio, la propiedad individual de la tierra, el sacrificio de la madre tierra, el racismo, el sexismo, el individualismo, lo material por encima de lo espiritual y todos los demás monocultivos de la mente y de la sociedad –económicos, políticos y culturales- que intentan bloquear la imaginación emancipadora y sacrificar las alternativas.

La amplitud de la propuesta santiana es proporcional al tamaño de los antagonismos que éste coloca como interlocutores y/o desafíos a los cuales disputar: colonialismo, capitalismo y patriarcado. No se puede negar el carácter de esa empresa, al respecto, el mismo Santos afirma: “entiendo por Epistemología del Sur la búsqueda de conocimientos y de criterios de validez del conocimiento que otorguen visibilidad y credibilidad a las prácticas cognitivas de las clases, de los pueblos y de los grupos sociales que han sido históricamente victimizados, explotados y oprimidos, por el colonialismo y el capitalismo globales”. En términos generales, las ES han resultado en los últimos años novedosas, en tanto apuntan a poner en cuestión las formas de conocimiento, y por ende, el trabajo teórico-empírico-político que circunda los procesos sociales -de resistencia-, al tiempo que esbozan una serie de dispositivos que visan ampliar la inteligibilidad del conocimiento sobre el acontecer del Sur. También, es valido decir que, se presentan con cierta pretensión de abarcabilidad que no parecen visibilizar del todo las tradiciones de lucha que en Nuestra América se tejen de manera aun más marginal que lo que su corpus resalta.

Boaventura-de-Sousa-Santos-Universidad

Sociologías y Epistemologías 

El diagnóstico epistemológico que propone Santos concibe a la racionalidad occidental moderna como una sutil forma de contraer el presente al tiempo que pretende expandir el futuro de manera indefinida. Para superar la fragmentación y el deterioro de cierta injusticia epistémica, concibe a la sociología como una modalidad de intervención teórico-empírica potente y transgresiva para descolonizar las ciencias sociales occidentales, exorcizar el conocimiento producido según las lógicas coloniales-capitalistas-patriarcales y construir así una teoría y una praxis críticas situadas en el Sur Global.

La sociología de las ausencias como trabajo teórico-empírico sobre el presente, entendido como pasado incompleto, busca en primera instancia desmentir aquella lógica que tiende, inalterablemente, a mostrar como “no existente” la experiencia social popular de base, que es descartada y producida como ausencia por parte de la racionalidad occidental y las ciencias sociales que nacen de ésta. La indolencia de la razón, según Santos, vinculada a la gravitación del Estado liberal, el desarrollo capitalista global y la revolución industrial, es el punto de partida que da lugar a una sofistificación de la teoría crítica y a una atención epistemológica más afinada. 

Tanto la sociología de las ausencias –crítica de una razón metonímica (racionalidad totalizante y dicotómica)-, como la sociología de las emergencias -atenta a la producción de experiencias alternativas posibles que están sucediendo, crítica de un tipo de razón proléptica (que concibe el futuro de manera lineal)-, requieren de una epistemología de lo ausente cuya tarea central sea expandir el concepto de lo real en términos blochianos: la realidad es más que el dato fáctico, es también lo imaginado y lo emergente. El trabajo teórico-político que proponen las ES a partir del pasado incompleto y el presente incumplido, consiste en ampliar el horizonte de posibilidades existentes desde una mejor comprensión de las emancipaciones posibles, es decir, desde una simetría entre éste y el horizonte de inteligibilidades factibles.

En esa línea de razonamiento, sólo la ecología de saberes y la traducción intercultural pueden, en términos de Santos, concretar la amplitud de ese horizonte de inteligibilidades tentativo. Puntualmente se busca el diálogo de los saberes académicos con los saberes surgidos de los sectores populares en sus luchas subalternas; al tiempo que se pretende que la traducción intercultural sea un mecanismo de articulación, coherencia e inteligibilidad entre experiencias y luchas sociales. La diversidad infinita entre formas de comprensión mundana y las brechas de su transformación, se producen en la sinergia del sentir, pensar, actuar y traducir la empíria y el conocimiento que sobreviene en teoría a partir de las prácticas históricas situadas.

*Por Oscar Soto para Iberoamérica Social.
**Politólogo y Esp. en Epistemologías del Sur (CLACSO). Docente Facultad de Ciencias Políticas y Sociales – UNCuyo, Mendoza, Argentina.

Palabras claves: América Latina, Boaventura de Sousa Santos, capitalismo, ciencias sociales, colonialismo, epistemología, opresión

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