Macri Fútbol Club: Offshore, fugas y sociedades anónimas (Parte I)

Macri Fútbol Club: Offshore, fugas y sociedades anónimas (Parte I)
10 abril, 2018 por Redacción La tinta

El entramado offshore que atraviesa a los funcionarios del actual gobierno de Cambiemos tiene su prehistoria en el modelo de negocio que inauguró Mauricio Macri en su desembarco a Boca Juniors. Así como los logros deportivo sirvieron de plataforma electoral, nombres como los de Gustavo Arribas y Valentín Díaz Gilligan se conectan en la compra venta de jugadores y en la administración del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires hasta hoy: Fue Gilligan, segundo de De Andreis y hombre de confianza de Arribas quien se encargó de limpiar a ESPN y Mediapro en la entrega de los derechos de televisión de fútbol a Fox-Turner.

Por Carlos A. Villalba

La primera puñalada fue de Rubén “el Mago” Capria; siete minutos más tarde quien enterró la hoja fue Marcelo Delgado, 60 segundos después Claudio “Piojo” López metió la tercera estocada. Solo habían pasado diez minutos y el local, Boca Junior, ya perdía 3 a 0 con Racing, un partido que terminaría ganando el de Avellaneda 6 a 4, y lo dejaba sin la punta de un campeonato que ganaría Vélez Sarfield.

Los números con verdadera importancia, sin embargo, serían los 4415 votos que sacó esa misma tarde el joven magnate Mauricio Macri, por encima de los 2643 de la dupla Antonio Alegre y Carlos Heller, que durante una década había reflotado a un club hundido económicamente, aunque coronando un solo campeonato local y una copa internacional de escaso valor.

Aquel domingo 3 de diciembre de 1995, arrancaba una ruta de mala administración de Boca pero con extraordinarios resultados deportivos, de la mano de Carlos Bianchi tras los fracasos iniciales de Carlos Bilardo y Héctor Veira: 6 torneos locales de una ronda, 4 Libertadores, 2 intercontinentales, otras tantas sudamericanas y 2 recopas. Fue la plataforma de largada del hombre del imperio SOCMA-SIDECO hacia el Gobierno de la Ciudad Autónoma de Bueno Aires, paso previo al desembarco en la Presidencia de la Nación con los hombres más cercanos a su grupo económico, a su familia y a las empresas y bancos más poderosos del mundo.

La radiografía de aquella década de “gestión deportiva” contiene buena parte de los condimentos de lo que sería, veinte años después, la gestión presidencial más devastadora y en menor cantidad de tiempo para el conjunto de los argentinos, con récord de empobrecimiento y marginalización de personas: aumento del 25% en la cuota social en una institución superavitaria; reducción salarial de empleados y plantel profesional; recorte de gastos en el resto de los deportes salvo el básquet; “remodelación” del estadio a cargo de su empresa familiar; creación de un Fondo Común de Inversión destinado a la compraventa de jugadores que se quedaba con las ganancias de los negocios exitosos y descargaba en el club los malos; offshores en guaridas fiscales para opacar el origen del dinero; evasión impositiva, con el escribano Gustavo Arribas al frente de la operaciones, además de un fuerte aumento de la deuda.

Las denuncias incluyen la captura del 15% del pase que corresponde por ley a los deportistas. El tesorero de Futbolistas Argentinos Agremiados, Carlos Pandolfi, afirmó en sede judicial que varios jugadores renunciaban al cobro de ese porcentaje, que nunca llegaba a Boca, para alcanzar un contrato en el exterior.

boca-macri-offshore-futbol-latinta
De izquierda a derecha: Diego Benedit (vocal de River), Fernando de Andreis, Rogelio Frigerio y Valentín Díaz Gillian.

Lavanderías

Desde su asunción presidencial en diciembre de 2015, Macri y el equipo gerencial que maneja los hilos de su gestión viven denunciados por la existencia de una telaraña de cuentas y empresas offshore, a su nombre o bajo la cobertura de testaferros. Esas herramientas financieras no necesariamente constituyen un delito, aunque en su inmensa mayoría están destinadas a esconder capitales mal habidos o, al menos, a evadir impuestos en los países de origen, lo que sí es ilegal. Algo que omitieron el jefe de gabinete, Marcos Peña, o el propio mandatario en su entrevista con su periodista preferido (Luis Majul), en sus argumentos defensivos frente a la andanada de acusaciones opositoras por la propiedad de una administradora de fondos de inversión con sedes en distintas guaridas fiscales, ocultada del ministro de Finanzas, Luis Caputo, y no expresada en su declaración jurada de bienes. (1)


El relato M se escribe con una liviandad que, pocos días después, en la búsqueda del “elector blando” a través de un reportaje concedido a una animadora televisiva (Mariana Fabbiani) que apunta a públicos no politizados, Macri insistió en la inocencia de las offshore y reconoció lo delictivo de no declararlas.


El origen de los fondos offshore, en la mayoría de los casos, recae en actividades criminales, desde el tráfico de drogas o de armas y la trata de personas, hasta el contrabando, como el controlado por el Grupo Macri a través de la empresa fantasma Opalsen, en la venta de autopartes a Uruguay, luego “reimportarlas” como autos terminados, disfrutando de reintegros de ida y de vuelta con una pérdida de 450 millones de dólares para el fisco argentino, al finalizar los años ´90. (2)

El caso Caputo reverdeció a partir del destape de las cuentas, una vez más offshore, del ahora renunciado subsecretario general de la Presidencia, Valentín Díaz Gilligan, que ocultó la posesión de u$s 1,2 millones en una cuenta de la Banca Privada de Andorra, país que, además de las belleza de sus paisajes pirenaicos, es otra de las guaridas elegidas por los capitales dudosos para su triangulación u ocultamiento. La operación fue infinitamente menos importante que la de Caputo, un cuadro también infinitamente más importante en el esquema de gobierno… Sin embargo, el asesor de los fondos buitre y colocador y receptor simultaneo de acciones del Fondo de Convertibilidad de la ANSES sigue firme con el negocio del endeudamiento externo del país. (3)

El macrismo, tanto municipal como nacional, acostumbra responder a estas denuncias con la cobertura de la “privacidad” o la “antigüedad” de los hechos. Su jefe por ejemplo trató de sacarse de encima los Panamá Papers diciendo incluso que “ni recordaba” los hechos que se le adjudicaban. Ante cada presentación judicial, disimulada por los medios, el discurso oficial satura la comunicación con la alabanza de la “transparencia” y apela a imágenes como la de “los bolsos de López”, cargados de dólares surgidos de coimeros de la obra pública (que en tiempos K tuvo a Nicolás Caputo, Angelo Calcaterra y las empresas de la trama SOCMA en los primeros escalones de beneficiarios).

De los dos lados del río

El caso de Díaz Gilligan apoyó la punta del compás en uno de los planetas favoritos de la galaxia macrista: el fútbol y su uso económico y político. Gilligan administró su cuenta oculta por la que hoy está acusado de “lavado de dinero” y “omisión maliciosa”, siendo funcionario macrista de la Ciudad de Buenos Aires.

Estaba radicada en la guarida de Andorra, a nombre de la firma Line Action , dedicada a la compra venta de futbolistas, basada en Inglaterra y perteneciente a la empresa panameña Nashville North Inc, de la que Gilligan fue director hasta 2014. Intentó justificar los hechos detrás de un pedido del empresario futbolístico uruguayo Francisco “Paco” Casal, sobre el que recaen sospechas y acusaciones de lavado de dinero. Suelto de cuerpo se definió como testaferro del magnate oriental al afirmar que “Casal tenía problemas en su país y me pidió el favor. Tenía un juicio con el fisco que ganó y no podía figurar”.

boca-macri-offshore-futbol-latinta
Gustavo Arribas, representante de jugadores de fútbol. Actualmente titular de la Agencia Federal de Inteligencia

Fútbol para pocos

Entre los compromisos asumidos como candidato presidencial, el 15 de noviembre de 2015 Mauricio Macri prometió en su “debate” con Daniel Scioli la continuidad y gratuidad del Fútbol para Todos (FPT) «pero sin política». No cumplió; el 1° de enero de 2017 el programa creado durante el gobierno de Cristina Kirchner dejó de existir formalmente, el 24 de febrero la Asamblea de Representantes de AFA rescindió el contrato y comenzaron las negociaciones para quedarse con un bocado de miles de millones de pesos.

Hubo tres aspirantes: ESPN, la catalana Mediapro y la fusión Fox-Turner, que terminó adjudicándose el negocio empujada por el Grupo Clarín y su asociada Torneos y Competencias y contó con el lobby hasta del entonces presidente estadounidense Barack Obama. El análisis de las propuestas recayó en el estudio jurídico Bruchou y el economista Daniel Artana, contratados por el titular de Boca, operador y amigo del mandatario argentino, Daniel Angelici.

El secretario General de la Presidencia, Fernando De Andreis, fue el encargado de “ordenar” el tema y puso al frente del dispositivo a su segundo y hombre de confianza de Gustavo Arribas, Díaz Gilligan, quien cumplió un papel decisivo en el trámite, incluso en la extraña prórroga de 72 horas otorgada a Fox-Turner para “completar” la entrega de las propuestas. Habían dejado al costado al grupo líder en el sector audiovisual europeo, valuado en más de 2.000 millones de euros, con 45 sedes en 26 países de 4 continentes poseedora de los derechos de televisación en España, por ejemplo de la Liga Santander, la Champions League y Europa League.

Meses después, la tapa del diario español El País, del Grupo Prisa, destapaba sus negocios ocultos en Andorra. En simultáneo, la estrella de operador de la derrota de Mediapro en la Argentina se apagó.

Pero Gilligan no fue el primero de Macri involucrado en manejo de dineros provenientes de la pelota. Gustavo Arribas, titular de la Agencia Federal de Inteligencia, dedicó su vida a ser representante de jugadores, elaborar los contratos en las transferencias en el Boca de Macri y actualmente acusado de recibir cheques de testaferros de Odebrecht.

*Por Carlos A. Villalba. Periodista y Psicólogo. Investigador argentino asociado al Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (Publicado originalmente en: http://estrategia.la)


(1) Carlos A Villalba. De la ESMA a Macri: la Argentina offshore (3IX16) http://www.surysur.net/de-la-esma-a-macri-la-argentina-offshore/

(2) Carlos A Villalba. MacriPapers al rojo vivo: Un Delgado cordón molesta al presidente argentino (24XII2016)
http://questiondigital.com/macripapers-al-rojo-vivo-un-delgado-cordon-molesta-al-presidente-argentino/

(3) Carlos A Villalba. Macripapers VI. Año nuevo del gabinete en el paraiso (12I2018)
http://www.laotracampana.com.ar/macripapers-vi-anio-nuevo-gabinete-en-el-paraiso.html

Palabras claves: Boca Juniors, Daniel Angelici, Gustavo Arribas, Mauricio Macri

Compartir: