Barriletes: los nuevos y “peligrosos” enemigos de Israel
El ejército israelí se encuentra alerta ante la nueva amenaza que lo desvela: los barriletes que los palestinos lanzan desde la Franja de Gaza.
Por Leandro Albani para La Tinta
Por más que la propaganda israelí difunda por todo el mundo que la represión desatada contra el pueblo palestino tiene como fin la “seguridad” del Estado, las cientos de denuncias contra las fuerzas armadas hebreas dejan en claro que el objetivo no es más que diezmar a la población palestina. “Un genocidio progresivo”, lo define el intelectual israelí Ilan Pape.
En estas últimas semanas, el mundo ve en silencio cómo el ejército israelí dispara a mansalva contra los palestinos y las palestinas. Durante la “Gran Marcha del Retorno” que comenzó en la Franja de Gaza el 30 de marzo, el gobierno de Tel Aviv ordenó fuego a discreción contra los manifestantes. Más de cuarenta muertos, entre ellos varios menores de edad, y miles de heridos es el saldo tristemente conocido por el pueblo palestino.
El 20 de abril pasado, en el marco de las movilizaciones que continúan en Gaza, se conocieron una serie de fotos de barriletes que surcaban los cielos hacia la frontera impuesta por Israel. Con los colores de la bandera palestina, en las colas de los barriletes se pudo observar un fuego que desprendía humo negro.
La agencia de noticias EFE describió el nuevo “arma” de los palestinos de la siguiente manera: “Bajo un olivo, a unos cientos de metros de la valla de seguridad custodiada por militares israelíes, un grupo de adolescentes gazatíes están atareados con papeles de colores y botellas de plástico vacías (…) Fabrican una cometa con los colores negro, blanco, verde y rojo de la bandera palestina. Llenan una botella con combustible, la atan a la cometa y caminan hacia la frontera (…) A una distancia prudencial para evitar ser blanco de disparos, prenden fuego a la botella y lanzan la cometa. Una vez en el aire, sueltan el hilo y miran cómo pasa por encima de la frontera y cae envuelta en llamas”.
¿Acaso el ejército de Israel, el más poderoso de Medio Oriente, que cuenta con armas nucleares, tiene que encender las alertas ante los barriletes? Claro que sí, sobre todo si el Estado israelí se funda en el apartheid, la represión y la difusión paranoica de “enemigos” que lo acechan.
A mediados de abril, el Canal 14 de la televisión israelí anunció que las fuerzas armadas estudian la gravedad de la amenaza de los barriletes de papel lanzados desde los territorios palestinos ocupados. El temor del ejército no es otro que los palestinos y las palestinas “puedan hacer volar miles de barriletes cargados con materiales inflamables sobre el espacio aéreo que rodea la línea de separación de la Franja de Gaza”, según informó el Canal 14. Seguido a esto, las fuerzas armadas israelíes calificaron a los barriletes como “un nueva arma y forma de terrorismo”.
Aunque todavía no se ha reportado ninguna “víctima fatal” por los barriletes, algunos medios internacionales no dudaron en calificar como “aviones de guerra palestinos” a los también conocidos cometas, construidos con madera y papel.
Por su parte, el ejército israelí reconoció que todavía “no ha desarrollado métodos para combatir este fenómeno”, contra el que el moderno sistema defensivo “Cúpula de Hierro” es ineficaz. “De hecho, constituye un arma simple pero capaz de poner en jaque a todo el ejército desplazado en la frontera”, argumentaron desde las fuerzas armadas.
El ejército israelí reportó varios focos de incendios en la frontera, pero no más que eso. Igualmente, fueron movilizados seis helicópteros para combatir el fuego.
Mientras los barriletes vuelvan, el Estado israelí sigue apostando francotiradores en su frontera, que hacen blanco en cualquier palestino que se cruce por su camino. Días atrás, el ex general de brigada Zvika Fogel declaró a la radio israelí Kan que los francotiradores del ejército hebreo tienen autorización para disparar a las personas que consideren una amenaza, aunque sean niños. “En el nivel táctico, cualquier persona que se acerque a la valla, cualquiera que pueda ser una amenaza futura a la frontera del Estado de Israel y sus residentes, debe pagar un precio por esa violación”, justificó el ex alto mando militar.
Según la explicación de Fogel, un niño podría esconder un artefacto explosivo y acercarse a los soldados israelíes o a las vallas para hacerlas explotar. Ante esta situación, de la que no se tienen demasiados antecedentes ni pruebas concretas, los menores de edad “merecen ser castigado con la muerte”, estimó Fogel.
Desde hace siete décadas, el pueblo palestinos encuentra nuevas formas de resistencia. Ya sea con la campaña internacional BDS (Boicot, Desinversión y Sanciones), en el plano diplomático –pese a las profundas deficiencias de la Autoridad Nacional Palestina-, o dejando volar barriletes hacia el cielo, las palestinas y los palestinos saben que no tienen nada que perder, salvo las cadenas de la ocupación.
*Por Leandro Albani para La Tinta