La Economía Feminista llegó para quedarse

La Economía Feminista llegó para quedarse
29 diciembre, 2016 por Redacción La tinta

Con la presencia de las Doctoras Diana Maffía y Corina Rodríguez, el miércoles 14 de diciembre se presentó en la Facultad de Ciencias Económicas de la UBA el libro “Economía Feminista: cómo construir una sociedad igualitaria (sin perder el glamour)” de la Dra. Mercedes D´Alessandro.

La presentación fue organizada por el Espacio de Economía Feminista (EEF-SEC) y la Regional Buenos Aires (EsEP-UBA) de la Sociedad de Economía Crítica binacional Argentina y Uruguay (SEC).

15578976_1274122302661253_6031720021861206533_nEl libro, escrito por la Dra. Mercedes D’Alessandro, es una narrativa necesaria para seguir instalando la economía feminista en la sociedad y el feminismo en la economía. El mismo describe de una manera descontracturada, entretenida y con humor (tan necesario para enfrentar las violencias cotidianas) como la desigualdad de género afecta en la vida de las mujeres. La autora se pregunta, ¿podemos aspirar a un mundo igualitario cuando ni siquiera reconocemos el trabajo cotidiano de millones de mujeres? ¿Qué las mujeres no se queden en los hogares cuidando significa desamor?, ¿por qué nunca está en juego que quien se quede en la casa sea el padre?

El libro fue presentado junto con dos excelentísimas pensadoras de Argentina. La Dra. Corina Rodríguez Enríquez profundizó en seis razones por las cuales se debería regalar el libro complejizando sobre las brechas de género, sobre las desigualdades de género en el campo de la economía, poniendo en evidencia cómo la reproducción de las condiciones de vida de toda la sociedad está en manos de las mujeres a través de los trabajos de cuidados y las tareas domésticas. La economista destacó dos discusiones centrales y que están pendientes en la Economía Feminista y que el libro introduce. Una, es lo que la autora en su libro desarrolla como las variables LGTB, para avanzar en una economía feminista que no problematice sólo el lugar de las mujeres, y lo segundo, tiene que ver con el rumbo incierto del trabajo y las implicancias de la robotización y de cómo este futuro puede afectar el cruce entre relaciones de género y las relaciones económicas vinculadas con el desarrollo laboral de las personas. Por último, Rodríguez calificó al libro como uno provocador. Muchas feministas serían reticentes a usar o comprar la cartera glamorosa: “Aunque yo no guste o use el estilo, tenemos que recordar que el feminismo justamente se trata de un llamado a la diversidad y a reconocer que se hace feminismo desde distintos lugares de enunciación, con o sin glamour, con o sin pelos en las piernas, sin corbata pero también con pechos y corbata”.

Por su parte la Dra. Diana Maffía, entre otras profundizaciones filosóficas, ahondó sobre el importante trabajo de documentación del libro y la necesaria estrategia de ser una lectura accesible para personas que no necesariamente entienden sobre economía. El libro nos llama a preguntarnos, ¿qué tiene que ver el sexo con la Economía? ¿Cuál es el sexo de las disciplinas? Diana disparó: “muchísimas mujeres han podido salir al ámbito de lo público pero no han podido negociar en el ámbito de lo privado aquellas cosas que les permitirían igualdad. Todavía se toman esos aspectos como una expresión de amor”. ¿En qué consiste la tarea doméstica? ¿Consiste en la expresión de cuidado y del amor maternal y/o conyugal o consiste en la reproducción gratuita de la reproducción de la fuerza de trabajo que permite la acumulación y que el varón se beneficie?

15390921_1274122515994565_4447604614381648366_n“Sin las mujeres no se mueve el mundo”

En sus intervenciones, las expositoras señalaron la importancia de problematizar las desigualdades de género y las brechas políticas económicas y sociales que producen. En Argentina, la brecha salarial entre varones y mujeres es del 27% y no se aleja de los datos que nos arrojan las estadísticas de los países centrales. Si observamos el trabajo no registrado en Argentina (aquél sin ninguna protección social), esa misma brecha asciende al 39%. Por su parte, se señaló un dato preocupante: el desempleo juvenil promedio es de 18,9 por ciento, pero la falta de trabajo de las chicas menores de 30 años llega al 22,3 por ciento de la población. Otro dato estremecedor, es que aún en ocasiones observando nuevas paternidades que asumen algunos trabajos de cuidados de hijos e hijas, en Argentina el 76% del trabajo doméstico no remunerado sigue recayendo en las mujeres.

“Es muy necesario de visibilizar el trabajo de cuidados y reproducción como un sostén central en la economía: sin las mujeres no se mueve el mundo”, fue una frase sostenida en el panel.

Las mujeres siguen incorporándose al mercado de trabajo, pero no se han alterado las responsabilidades en el área reproductiva. Las mujeres y sobre todo las más pobres, quienes no pueden derivar trabajo de cuidados en el mercado u otras instituciones, son quienes más sufren el peso de una injusta distribución de la carga de trabajo cuando el mercado de trabajo y la reproducción en sus hogares se encuentran.

La charla, un importante diálogo entre distintas visiones de la economía y los feminismos, concluyó poniendo sobre la mesa la necesaria relevancia del trabajo de cuidados y reproducción habiendo un pleno acuerdo en la importancia de despatriarcalizarlos, desprivatizarlos y desmercantilizarlos. Asimismo se problematizó la necesidad de trascender las apariencias a través de las cuales se incorpora las relaciones de género “como una moda” en el debate sobre las políticas públicas y desde los organismos internacionales.

Una invitación a la Economía crítica

La actividad fue organizada por la Sociedad de Economía Crítica (SEC), un espacio imprescindible en la formación de contenidos y corrientes de la economía crítica que están ausentes en la mayoría de los programas de las facultades de Ciencias Económicas. El Espacio de Economía Feminista en la SEC se conformó en 2016, y busca deconstruir desde la teoría aquellos marcos que reproducen la asimetría entre géneros, cuestionando lugares asignados, evidenciando construcciones de roles y funciones adjudicadas a unos y otras en torno a los géneros, la identidad y la sexualidad.

Abordar la Economía desde el feminismo, aporta el marco político y teórico que invita a visibilizar la desigualdad y repensar la producción y la organización social en favor de una vida más vivible y sin violencias para las mujeres, lesbianas, travestis y trans.

La Sociedad de Economía Crítica también presentó su revista académica N° 5, los Cuadernos de Economía Crítica que invitan a producir, reflexionar y difundir trabajos teóricos y empíricos con el objetivo de dar lugar a orientaciones que hoy están excluidas en la academia oficial de nuestros países. En la presentación se hizo especial énfasis, además, en participar de la confección de trabajos para el próximo dossier Economía Feminista en América Latina.

Así que a estar atentas, se reciben contribuciones hasta el 1 de junio de 2017, a través de la página web: http://sociedadeconomiacritica.org/ojs/index.php/index/index

*Por Patricia Laterra para Marcha
*Economista feminista, integrante del Espacio de Economía Feminista de la Sociedad de Economía Crítica.

Palabras claves: economia, feminismo

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