De La Habana a Santiago de Cuba
Largas horas de viaje para llegar a Santiago.
Son los últimos días de Fidel recorriendo la Isla. En Santiago es esperado por multitudes que lo velarán una última vez, para acompañarlo en el último viaje antes de ser enterrado en el Cementerio de Santa Ifigenia.
Son 9 días de luto, la vida sigue y las cosas cambian. En La Habana se respira un aire solemne, hay ley seca y no hay música en las calles pero la vida continúa. En las calles se llora a Fidel, se grita a Fidel y los propios santiagueños se autonombran: “Yo soy Fidel”.
La gente habla de él, te pregunta… Lo apoya, lo ama y también disienten.
Para algunos no habrá cambios, la Cuba de Fidel, sin Fidel seguirá su legado; otros creen que Raúl no está a la altura; otros tantos esperan el cambio.
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